Fue encargada por los vecinos tras la Guerra Civil con aportaciones propias cuando 'se pasaba hambre'
La persona que durante la noche del pasado martes sustrajo las alhajas de la imagen de la Virgen de las Injurias de Callosa d’En Sarriá (Alicante) ha devuelto anónimamente una de las piezas, la corona dorada, probablemente al descubrir que era una réplica de poco valor.
Así lo piensa el párroco de la iglesia, el colombiano Ruperto Ávila, quien en declaraciones a Efe ha relatado que la corona original para adornar la imagen de la patrona del pueblo tiene 658 gramos de oro y fue encargada por los vecinos tras la Guerra Civil con aportaciones propias cuando ‘se pasaba hambre’.
Por ello, tiene un gran valor económico pero sobre todo sentimental para los vecinos.
Sin embargo, esta corona está depositada durante la mayor parte del año en la caja fuerte de una entidad bancaria y sólo se saca para adornar la imagen durante las procesiones de las fiestas locales, que acabaron precisamente el pasado martes.
Seguramente pensando que la corona original seguía sobre la cabeza de la Virgen de las Injurias, el ladrón o ladrones la cogieron durante la noche del martes pero al percatarse de que carece de valor económico, decidieron devolverla al día siguiente (ayer) depositándola en el altar de Santa Rita.
Allí la descubrió una feligresa devota de esta última poco antes de comenzar la eucaristía del miércoles.
‘Al saber que no era la buena, en vez de tirarla por lo menos han decidido devolverla. A lo mejor se trata de un devoto de la virgen’, ha señalado a Efe el sacerdote, que lleva en esta parroquia desde el pasado 10 de septiembre.
Además de esta corona, los ladrones se llevaron el martes otras alhajas de la virgen y el rosario del Niño Jesús, con un peso conjunto aproximado de 140 gramos de oro.
La réplica se encuentra en dependencias de la Guardia Civil para cotejar las posibles huellas dactilares con las encontradas en el altar cuando se descubrió el robo, por lo que la Virgen de las Injurias seguirá sin su corona un poco más, concretamente hasta que terminen de trabajar los agentes. (RD/Agencias)