No tiene mucho sentido que estén exentos del IBI los locales dedicados al proselitismo, las oficinas de la curia o las residencias de obispos, canónigos y sacerdotes
El portavoz de UPyD en Euskadi, Gorka Maneiro, ha presentado una proposición en el Parlamento vasco en la que aboga por la revisión de las normas que permiten a las confesiones religiosas no pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles. A su juicio, es necesario avanzar en la «laicidad del Estado y la autofinanciación de la Iglesia Católica y de otras confesiones».
En un comunicado, UPyD ha subrayado que «no es comprensible que en pleno siglo XXI se mantengan en la legislación española diversas cuestiones no demasiado acordes con la justicia social y la igualdad de ciudadanos, asociaciones y organizaciones no gubernamentales».
«Este es el caso de las confesiones religiosas y su tratamiento en materia fiscal, ya que obtienen importantes beneficios, como la exención de pago del Impuesto de Bienes Inmuebles, que no se aplican a otras asociaciones dedicadas a otros fines sociales», ha señalado Maneiro.
Tras recordar que en los últimos meses se está debatiendo en la sociedad la necesidad de que se supriman esos privilegios a la Iglesia Católica y a otras religiones, llegando algunos ayuntamientos a acordar la obligación de pagar el IBI, UPyD considera que la eliminación de las exenciones del IBI recogidas en el Acuerdo con la Santa Sede y los consiguientes con otras religiones «no puede ser llevada a cabo por los municipios y debería ser acordado en todo el Estado».
Por ello, ha propuesto que el Parlamento vasco inste al Gobierno central a revisar el Acuerdo sobre Asuntos Económicos entre el Estado y la Santa Sede, que tiene naturaleza de tratado internacional.
«No tiene mucho sentido que estén exentos del IBI los locales dedicados al proselitismo, las oficinas de la curia o las residencias de obispos, canónigos y sacerdotes, por lo que proponemos que deben pagar el IBI», ha manifestado Maneiro.
Por último, ha añadido que es necesario «avanzar en la laicidad del Estado y la autofinanciación de las confesiones religiosas, y la mejor forma de hacerlo es a través de una reforma general de la Ley Orgánica 7/1980, de Libertad Religiosa, que afecte a todas las confesiones religiosas y contemple la distinción entre las actividades sociales y las de promoción de la doctrina religiosa».
(Rd/Ep)