El pasado domingo el arzobispo de Valencia participó en la 'volta a peu', para la que se vistió con chándal y deportivas
La presentación, ayer, del congreso ‘Parroquia y Evangelización’, fue el escenario en el que el Arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, volvió a mostrar su clara sintonía con el papa Francisco. El prelado situó el acontecimiento -que tendrá lugar mañana y el sábado- en un contexto de «cambio de época» y planteó la iniciativa como una llamada a las parroquias a implicarse en la sociedad, cuenta Laura Garcés en Las Provincias.
La invitación de Osoro a la acción social de las comunidades parroquiales recordó un mensaje anterior: las palabras que hace unos meses pronunció el pontífice en Río de Janeiro cuando reclamó a los jóvenes que salieran a la calle porque lo que quería era «lío». El prelado no negó el paralelismo, sino que lo aceptó, «naturalmente», sumándose así a aquella invitación papal y convirtiéndose en impulsor del mensaje.
Son muchas las manifestaciones de acercamiento de Osoro al Pontífice. La sintonía del arzobispo con la línea del Papa no ha pasado desapercibida desde el primer momento. Fuentes consultadas por LAS PROVINCIAS ya apuntaron en octubre que el prelado «está interesado en hacer visible el mensaje del Papa: si hay algo caduco hay que cambiarlo».
Las coincidencias en lo que muchos ven un nuevo estilo al frente del gobierno de la Iglesia, no sólo se encuentran en palabras. También acompañan a iniciativas marcadas con el sello de acercamiento a la sociedad, a la gente. Sirva como ejemplo la participación el pasado domingo en la ‘volta a peu’ para la que se vistió con chándal y deportivas. Tampoco pasó desapercibido su interés por haber escuchado a los jóvenes que boicotearon la apertura del curso en la Universitat Politècnica, ni su costumbre de saludar a los fieles tras las grandes celebraciones.
El pasado domingo en su carta semanal reclamó que las parroquias sean «tan vivas que lleguen a todas las periferias». Y la misiva no quedó ahí. También reservó palabras para los pastores, afirmaciones que otra vez recordaron manifestaciones del Papa. Osoro sostuvo en la carta que el pastor «de la comunidad cristiana no debe perder la cercanía de la gente».
Son las pruebas más recientes, y todas ellas en torno al congreso de parroquias, pero no las únicas. A finales de septiembre Osoro fue el primer prelado español que de forma abierta hizo suya la postura de Roma en torno a los roles de la mujer en la Iglesia, el aborto, el divorcio o la homosexualidad.
En todo momento se ha mostrado próximo al nuevo estilo que, al parecer, quiere imprimir la Iglesia a su acción evangelizadora. En medio de esos planteamientos se desarrollará el congreso que entre mañana y el sábado reunirá en la catedral de Valencia a más de 1.600 personas procedentes de 350 parroquias. Todos ellos asumen su participación desde el planteamiento de que la comunidad cristiana «asiste a un cambio de época». Para afrontarlo es necesario «revisar y revalidar la manera de hacerse presente en este mundo» porque la comunidad cristiana «tiene que pensar que no está encerrada en sí misma, sino que sale a la calle a dar testimonio con palabras y obras», expuso el arzobispo.
En el congreso participan sacerdotes, fieles de parroquias y miembros de institutos de vida consagrada, de nuevos movimientos y comunidades cristianas con el deseo de ofrecer un carácter integrador a la iniciativa. El programa contempla 14 ponencias que implicarán no sólo cuestiones teóricas. También se aportarán experiencias de evangelización, explicó el vicario de Evangelización, Javier Llopis.