Rajoy ha agradecido la labor y ayuda que la Iglesia viene realizando en favor de los más necesitados, "especialmente durante el tiempo en que la crisis les ha golpeado más duramente"
(Jesús Bastante).- Lo que no pudo conseguir Rouco, lo acaba de hacer Blázquez. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recibido esta mañana al líder del Episcopado español, Ricardo Blázquez, en el Palacio de la Moncloa. Las relaciones, tensas, entre ambas instituciones desde la llegada al poder del político gallego, parecen encontrar nuevos canales, imprescindibles para alcanzar acuerdos de futuro.
En 2008, poco antes del congreso de Valencia y tras su segunda derrota electoral ante Rodríguez Zapatero, Mariano Rajoy pidió árnica al presidente del Episcopado, Antonio María Rouco Varela, ante los ataques recibidos a diario desde la Cope por Federico Jiménez Losantos.
El cardenal, entonces, prefirió apostar por Esperanza Aguirre. Los dos gallegos no olvidaron ese último encuentro. Una vez elegido presidente del Gobierno, Rajoy se negó a recibir o encontrarse en público con el purpurado. Esta misma mañana, el jefe del Ejecutivo ha recibido, por espacio de 45 minutos, a Ricardo Blázquez.
El encuentro, según informa la CEE, tuvo lugar a las diez de la mañana en el Palacio de la Moncloa, y se desarrolló «de manera muy satisfactoria para ambas partes, en un ambiente de cordialidad y con un diálogo cercano y fluido«. Algo imposible de atisbar durante la etapa de Rouco Varela que, por cierto, hoy acudió a Roma a la Audiencia papal, justo después de que Francisco recibiera a Blázquez y Osoro en Roma.
«Blázquez -prosigue la nota- ha agradecido al Presidente Rajoy la oportunidad de conversar sobre asuntos de las relaciones Iglesia-Estado. Además, ha habido tiempo para hablar sobre algunos aspectos de la situación internacional y en particular de España, con realismo y profundidad«.
En este sentido, el Presidente de la CEE «ha mostrado su satisfacción por el correcto funcionamiento institucional que se ha manifestado en estos días pasados, con motivo de la proclamación del Rey Felipe VI, y ha destacado la gran madurez demostrada por la sociedad española para afrontar con serenidad y esperanza las dificultades sociales y económicas sufridas en estos años».
Por su parte, Rajoy ha agradecido la labor y ayuda que la Iglesia viene realizando en favor de los más necesitados, «especialmente durante el tiempo en que la crisis les ha golpeado más duramente». Como ha expresado monseñor Blázquez, «la Iglesia se siente satisfecha de poder contribuir eficazmente con la sociedad, cumpliendo su misión; y está dispuesta a seguir colaborando con las instituciones estatales, en el marco del mutuo reconocimiento de las respectivas misiones, en el servicio al bien común».
Un encuentro especial, que a buen seguro marcará nuevas reuniones, donde se concretarán algunos aspectos a tener en cuenta de cara al futuro. Una reunión que se produce dos días después de la recepción papal, a pocos días de la visita de Felipe VI y Letizia al Vaticano y cuando está a punto de aprobarse el proyecto de Ley de reforma del Aborto que la Iglesia ve como una mejora respecto al anterior del Ejecutivo socialista, y que una mayoría de la sociedad considera un atraso histórico.