Fue el primer Papa moderno. Montini insiste en la modernidad, se enfrenta a ella, quiere entenderla y abrazarla
(Jesús Bastante).- «Pablo VI ha sido arrinconado entre los pontificados de dos papas santos: Juan XXIII y Juan Pablo II». La sentencia de Giovanni Maria Vian recoge, seguramente, cuál fue el destino de Montini, una figura jamás reconocida y a la que la Iglesia española ha querido rendir, este fin de semana, un merecido homenaje.
Lamentablemente, tampoco hoy se hace justicia a un hombre cuyo influjo es imprescindible para entender el pontificado del Papa Francisco. Y es que, tras el rotundo lleno episcopal para escuchar al cardenal Parolin, la gran mayoría de los obispos no acompañaron con su presencia las primeras conferencias celebradas en la Fundación Pablo VI.
Apenas una docena de prelados (comandados por su presidente, Ricardo Blázquez, y su vicepresidente, Carlos Osoro; los arzobispos de Barcelona y Burgos; el obispo de Guadix o los miembros de la Comisión de Pastoral de la CEE) siguieron la primera de las conferencias, impartida por el director de L’Osservatore Romano. Unas 150 personas asistieron al acto, que continuó con una segunda conferencia sobre «la renovación conciliar en España«, impartida por el cardenal Sebastián.
En su intervención, el historiador italiano destacó cómo, después de décadas de ostracismo, «quien está recuperando su memoria es su actual sucesor, el primer pontífice americano». «Francisco sigue cada vez más a Montini«, subrayó Vian, quien agradeció a la Fundación Pablo VI el homenaje al Papa Montini.
«Es un acto de justicia hacia un cristiano, y un Papa, que ha querido a España y que en España no ha sido comprendido. Muchos no han entendido a Montini», proclamó Vian, quien reveló cómo hubo tres viajes que Pablo VI jamás pudo realizar. El primero, en 1964, a Damasco, «para rendir homenaje al apóstol de los gentiles»; el segundo, en 1966, a Polonia, para celebrar el milenio de su cristianización, «pero el régimen comunista lo impidió»; y, en 1968, a España. «Pablo VI quiso venir, pero Franco no quiso renunciar al derecho de presentación de obispos», dijo el conferenciante.
¿Quién era este Papa? En una charla algo deslavazada, Vian dio algunas de las claves para entender el perfil de Montini. Y lo hizo leyendo partes de su testamento, en la que el Pap pedía que su tumba «fuera en la tierra misma. No quiero monumentos». «Quiso un funeral sencillo, como sencilla fue su vida».
El primer arzobispo que se postró en el suelo para besarlo, que gustaba de las cosas pequeñas, fue «proyectado a la diócesis más importante del mundo». Desde Milán, Montini «fue el primer Papa moderno. Montini insiste en la modernidad, se enfrenta a ella, quiere entenderla y abrazarla».
Las conferencias del simposio-homenaje a Pablo VI pueden seguirse por streaming en la siguiente dirección.
Mañana, el programa incluye las siguientes conferencias:
En la Fundación Pablo VI (entrada libre)
10.30 h. Cuarta conferencia: Una Iglesia en Misión. De Evangelii Nuntiandi a Evangelii Gaudium
– Card. Ricardo Blázquez Pérez, Presidente de la CEE12.00 h. Quinta conferencia: La tormenta de la Humanae Vitae
– Dra. Lucetta Scaraffia, Editorialista de L’Osservatore Romano17.00 h. Sexta conferencia: Pablo VI, el Papa del diálogo
– Dr. Juan María Laboa Gallego, Historiador18.30 h. Séptima conferencia: Pablo VI y las relaciones Iglesia-Estado en España
– Dr. Vicente Cárcel Ortí, Historiador19.30 h. Clausura del Congreso: Mons. Ginés García Beltrán
– Presidente Fundación Pablo VI