"Tenemos que recuperar el lenguaje de la mente, el corazón y las manos". Una misión en la que los jóvenes juegan un papel esencial, pues "los jóvenes son nuestro futuro"
(CEU).- En la segunda jornada del XVIII Congreso Católicos y Vida Pública, organizada por la Asociación Católica de Propagandistas y la Fundación Universitaria San Pablo CEU, ha tenido lugar el encuentro «La Iglesia en acción». En la mesa redonda han participado Guillermo Velasco Fabra, presidente de Ayuda a la Iglesia Necesitada, como moderador, y como ponentes, Rafael del Río Sendino, presidente de Cáritas, y Soledad Suárez Miguélez, presidenta de Manos Unidas (2012-2016).
Diálogo y palabra han sido el eje central de las ponencias. «El diálogo nos permite ver al otro como sujeto digno de ser escuchado, digno de ser apreciado y del que debemos aprender», ha dicho Rafael del Río Sendino. El diálogo es un mecanismo que «nos hace salir de nuestros propios espacios de confort para ir en busca del otro, porque, como dice el Papa Francisco, no nos podemos limitar a ser unos meros espectadores«, ha añadido Sendino.
Este diálogo del que ha hablado el presidente de Cáritas no es más que el trabajo que realizan todos los voluntarios, y que les permite aprender de las personas y del mundo actual. Asimismo, ha finalizado su ponencia con un mensaje esperanzador, declarando que «este mundo va a ser más justo y más solidario (…), ofreciendo motivos empezar de nuevo a las personas que sufren, llevando como bandera la generosidad para hacer un mundo mejor, donde permanezcan los derechos y la dignidad de las personas por encima de cualquier interés».
Por otro lado, Soledad Suárez Miguélez, ha hablado «de la misión de Manos Unidas, de hacer caminar la palabra recibida y la palabra dada; nosotros somos depositarios de la buena palabra«. «Desde el primer momento no se trata de auxiliar a las personas en determinados momentos, se trata de compartir lo que nos encontramos por el camino y luchar contra la pobreza, alumbrar un nuevo mundo».
Los más necesitados, ha añadido Suárez, saben cuál es la solución a sus problemas, solo necesitan ser acompañados, por ello desde Manos Unidas «hacemos camino de solidaridad (…), se trata de ponerse a caminar junto a ellos para construir una sociedad más justas y unas personas más felices».
Además, Rafael del Río Sendino ha denunciado también que «la preocupación de la Unión Europea, cada vez más rica, es construir mercados y no una sociedad mejor«. Aunque a pesar de ello, tanto Cáritas como Manos Unidas, han afirmado que cada vez son más las personas que ayudan y hacen por conseguir «que la persona a la que ayudan los voluntarios experimente la riqueza de nuestra humanidad gracias a una actitud de manos tendidas», tal y como ha añadido Sendino.
Una protesta a la que se ha sumado la presidenta de Manos Unidas (2012-2016) tachando de «insaciable avaricia» la que muchas personas tienen cuando solo piensan en destruir, acaparar…
Por su parte, el presidente de Scholas Ocurrentes, José María del Corral, ha reivindicado la recuperación de nuestra educación cristiana para combatir la crisis de valores mundial. «Nuestra educación está mutilada». Para del Corral, la educación cristiana tiene que «recuperar su sabor para recuperar la sabiduría». «Tenemos que recuperar el lenguaje de la mente, el corazón y las manos». Una misión en la que los jóvenes juegan un papel esencial, pues «los jóvenes son nuestro futuro».
En esta línea, el director de cine Pablo Moreno ha explicado que «los cristianos tenemos un papel muy importante en la cultura», pues «tenemos que olvidar la imposición. Tenemos que ser imanes que atraigan al espectador con coherencia y responsabilidad». Para ello, ha defendido la necesidad de realizar películas con «cuerpo y alma», películas que ofrezcan una mirada a un mundo en constante cambio y adaptación».
La directora general del Instituto Secular Cruzadas de Santa María, Lydia Jiménez, ha destacado que «el cristianismo se ha convertido en la nueva Paideia: Cristo es el centro de la nueva cultura». En definitiva, el cristianismo ha conservado la cultura griega y ha añadido la figura de Cristo. De tal manera, que integra la Verdad, el bien y la belleza. Por su parte, el periodista y escritor José María Zabala, ha aportado su testimonio de conversión y ha concluido que «sin Dios es imposible ser feliz».
Por otro lado, se ha celebrado la mesa redonda titulada ‘La religión y su presencia en los medios de comunicación’ que ha contado con la presencia del director de Comunicación del Arzobispado de Madrid, Rodrigo Pinedo Texidor, el corresponsal de ABC en el Vaticano, Juan Vicente Boo y el director de Vida Nueva, José Beltrán Aragoneses.
«Uno de los grandes problemas que tiene la información eclesial es que dispone de un gran menú de noticias elaboradas por un gran master chef, pero cuesta emplatarlo y poner los instrumentos para digerirlo. Esto provoca que las personas no puedan degustarlo. Nos faltan instrumentos para mejorar la comunicación religiosa, algo que el Papa Francisco está cambiando gracias a un discurso renovador y sencillo», ha declarado José Beltrán Aragoneses.
En cuanto al interés por la información religiosa por parte de los medios generalistas, el director de la revista Vida Nueva ha señalado que «la información religiosa es un actor más de la sociedad, algo que provoca que cada vez sea más atractiva».
No ha querido olvidarse de los numerosos estereotipos que persiguen a la Iglesia por parte de ciertos periodistas y medios de comunicación «algunos medios solo hablan de la Iglesia para dar información sobre abusos sexuales o falsas informaciones sobre privilegios. Pero también es cierto que hay otra realidad. No hay medio de comunicación que ante un conflicto internacional no haya tomado una imagen de un misionero. Ellos son referencia y aportan credibilidad en las noticias. Cuando todas las ONGs se van de las zonas en conflicto, los misioneros son los únicos que se quedan. Ellos presentan la realidad del Evangelio».
El cubano Gustavo Andújar, presidente de la Asociación Católica Mundial por la Comunicación (SIGNIS) y director del Centro Cultural Padre Félix Valera (La Habana), reclama que la acción de la Iglesia cubana deje de ser analizada conforme a un «filtro ideológico» que es totalmente ajeno a su esencia. A su parecer, la Iglesia de Cuba es enjuiciada en un contexto de polarización, y así, mientras el régimen continúa recelando de ella, los sectores contrarios a éste le reclaman que ejerza un papel de franca oposición que no le corresponde, según ha explicado.
Frente a quienes acusan a la Iglesia de «complicidad» con el poder en la isla, Andújar ha argumentado que la función de ésta no es la de ser el «partido de la oposición», sino la de ir paulatina y calladamente «ampliando espacios de expresión plural y diversa». Una opción «menos vocal» de lo que los críticos reclaman, pero «más eficaz», ha sostenido.
De hecho, ha descrito cómo el centro cultural que dirige, perteneciente al arzobispado de La Habana, o la revista Espacio Laical se han convertido en puntos de confluencia para el debate abierto y diverso. «Hoy vivimos una luna de miel con la intelectualidad porque ofrecemos espacios de libertad en los que todos pueden decir lo que quieran». Esto no quiere decir que la tarea sea sencilla, «en Cuba nada lo es», pero sí que la relación con las autoridades es algo más relajada que hace unas décadas y que se pueden conseguir cosas «con paciencia y contando con la buena voluntad de la gente».
Andújar ha defendido el talante abierto del arzobispado de La Habana, pues está avalado por resultados positivos como los resultantes del proceso de diálogo establecido con el Gobierno durante el año 2010, que se sustanció en la excarcelación de decenas de presos políticos.
Asimismo, el presidente de Signis ha reivindicado el catolicismo como algo propiamente cubano y muy arraigado en la esencia de la sociedad de este país caribeño. «Cuba es, independientemente de la propaganda ateísta, un país creyente». «La Iglesia católica -ha añadido- es respetada en nuestro pueblo no sólo por sus valores sino también por ser depositario de lo sagrado«.
El ponente ha sido presentado por el exdiputado del PP, Javier Puente, que ha subrayado la importancia de que los católicos participen también en el terreno de la política al objeto de evitar que «impere lo fácil, el dejarse llevar por la corriente, el todo vale, el renunciar a los principios por cuatro votos». Además, ha insistido Puente, los católicos «lo tenemos fácil, pues tenemos mil argumentos para defender nuestros hechos».