La cuestión de las "tribus perdidas de Israel" tiene origen en el año 722 antes de Cristo, cuando el reino de Israel fue conquistado por los asirios, y los israelíes, deportados, se desperdigaron por el mundo
Miembros de la etnia africana lemba, que afirman ser descendientes de judíos, expusieron este sábado en la capital de Zimbabwe, Harare, un trozo de madera del que afirmaron que formó parte del Arca de la Alianza, donde Moisés guardó las tablas con los Diez Mandamientos, y que simboliza el pacto de unión entre Dios e Israel.
Según la prensa local, el objeto, que había estado perdido durante años, fue recuperado recientemente de un almacén de Harare. Los lemba, unas 70.000 personas, afirman que sus ritos y creencias religiosas tienen trazas hebraicas, como el monoteísmo, la prohibición de comer carne de cerdo y de cocinar carne y leche juntas, la circuncisión de los niños y la estrella de seis puntas, que suelen usar en las lápidas de sus cementerios.
Según la historia oral de los lemba, hebreos de Judea se trasladaron a África pasando por Yemen.
Además de los lemba, otra tribu en Uganda afirma tener raíces judías, basándose en que poseen un cromosoma característico del pueblo hebreo, además de grupos en Afganistán, China e India, como los Bnei Menashe, de los cuales cientos viven en Israel.
Entre los judíos de raza negra reconocidos por los rabinos de Israel están los Beta Israel (falasha), la mayoría de los cuales fueron transportados desde Etiopía a Israel en 1984 y 1991 para que pudieran escapar de las hambrunas en el país africano.
La cuestión de las «tribus perdidas de Israel» tiene origen en el año 722 antes de Cristo, cuando el reino de Israel fue conquistado por los asirios, y los israelíes, deportados, se desperdigaron por el mundo. (RD/Agencias)