Y como arzobispo, también pido perdón en nombre de la Iglesia por todo lo que han hecho aquellos que trabajan para ella
El arzobispo de Munich y Freising pidió perdón el viernes por «todo lo que han hecho aquellos que trabajan para la Iglesia», al presentar un reporte que mostró que más de 250 sacerdotes y catequistas abusaron de niños en una diócesis que alguna vez fue presidida por el papa Benedicto XVI.
El cardenal Reinhard Marx, quien encomendó el reporte, dijo que la Iglesia Católica en Alemania tendría que trabajar para recuperar la confianza que ha perdido desde que surgieron a inicios de este año los reportes de abuso por parte de sacerdotes alemanes.
«Queremos aprender de nuestros grandes errores y mala conducta del pasado», subrayó Marx. «Y como arzobispo, también pido perdón en nombre de la Iglesia por todo lo que han hecho aquellos que trabajan para ella».
La fiscal Marion Westphal fue comisionada para examinar aproximadamente 13.200 documentos de la diócesis para el reporte, cubriendo un período de 1945 a 2009.
Ella señaló el viernes en una conferencia de prensa que ha encontrado casos de abuso por parte de 159 sacerdotes, pero subrayó: «debemos suponer que la cifra real es mucho más alta» dado que incontables documentos que se cree que habían servido como evidencia de una mala conducta están desaparecidos o al parecer fueron destruidos intencionalmente.
«Nos enfrentamos, al investigar los documentos, con un caso extensivo de destrucción y encontramos que muchos documentos no fueron almacenados en la oficina del obispo además de que presentaron indicios claros de manipulación», agregó Westphal.
En cuanto a los sacerdotes que se determinó que cometieron abuso, cerca de 26 casos fueron de naturaleza sexual, todos los cuales fueron procesados con base en las normas de la Iglesia en ese momento, indicó la fiscal. Ninguno de esos sacerdotes vive aún. El resto de los abusos fueron físicos.
El reporte también descubrió que 96 catequistas comisionados por la diócesis para impartir clases de religión en escuelas regionales habían cometido abusos, sólo uno de ellos de carácter sexual. El papa Benedicto XVI fungió como arzobispo de la diócesis de 1977 a 1981 (RD/Agencias)