Confiamos en que la Santa Sede reafirme la independencia del territorio que Israel ocupó en 1967
La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) ha pedido al Vaticano este lunes que «reafirme su postura histórica a favor de los derechos inalienables del pueblo palestino», de acuerdo con «el Derecho Internacional y las resoluciones relevantes de Naciones Unidas.
Nabil Shaath, comisionado de Relaciones Exteriores de Al Fatá y miembro del equipo palestino que negocia con la Santa Sede, ha expresado su preocupación ante las noticias que indican que Israel y el Vaticano van a firmar un acuerdo que, entre otras cosas, «reconocería la anexión y el control ilegal de Jerusalén Este por parte de Israel».
«Confiamos en que la Santa Sede aclare la situación y afirme que va a asumir su responsabilidad legal y moral» para «garantizar que cualquier acuerdo» mantiene su postura favorable al «derecho a la autodeterminación del pueblo palestino» y a «la independencia del territorio que Israel ocupó en 1967, incluido Jerusalén Este«, ha dicho en un comunicado.
Según algunos medios de comunicación, el borrador del acuerdo acepta explícitamente la aplicación de las leyes israelíes en zonas ocupadas de Jerusalén Este y reconoce la autoridad del Estado judío en los territorios ocupados palestinos.
Si finalmente se firma, será, según la OLP, la primera vez que una de las Altas Partes Contratantes del Convenio de Ginebra de 1949 reconoce la autoridad legislativa, ejecutiva y judicial de Israel en Jerusalén Este y en los demás territorios ocupados por Israel desde 1967.
Shaath ha recordado que el Vaticano es parte del «consenso internacional» que reconoce que «el territorio palestino, formado por Cisjordania, incluido Jerusalén Este, y la Franja de Gaza, está bajo la ocupación militar israelí«, por lo que no debe firmar ningún acuerdo que «ponga en peligro este hecho legal».
AMENAZA PARA LOS CRISTIANOS
En este contexto, el negociador ha señalado que «las políticas ilegales de colonización y expropiación» que aplica Israel son «la única amenaza importante para la paz y la presencia de cristianos en Palestina», como se reconoció en el Sínodo Especial sobre Oriente Próximo celebrado en 2010. «Esta triste realidad ha sido confirmada en repetidas ocasiones por organizaciones cristianas de todo el mundo», ha añadido.
Asimismo, ha criticado la construcción en los asentamientos judíos situados en territorio palestino, un problema especialmente grave en Jerusalén Este y Belén, a su juicio. «Constituye una amenaza para la posibilidad de alcanzar un acuerdo de paz basado en la solución de los dos Estados» (uno palestino y otro israelí), ha destacado.
«En este momento se precisa una acción internacional urgente para proteger la Tierra Santa y defender el derecho de nuestro pueblo a un futuro con paz y dignidad», ha afirmado.
Por otro lado, Shaath ha reafirmado el compromiso de la OLP con los tratados internacionales que defienden la libertad de culto y de conciencia, que se incluyen en el Acuerdo Básico que firmó con la Santa Sede en el año 2000.
«Puesto que se trata de la Tierra Santa y el lugar donde nació el cristianismo, nos enorgullece nuestra responsabilidad especial para con la Iglesia y el derecho de todos los cristianos del mundo a disfrutar de su derecho a la libertad de culto en Palestina. (…) Seguiremos cumpliendo nuestro deber nacional de defender los lugares santos palestinos, tanto cristianos como musulmanes», ha manifestado. (RD/EP)