Hace un mes, la BBC acusó al propio cardenal Brady de ocultar los abusos sexuales cometidos por el sacerdote Brendan Smyth
El primado de la Iglesia católica irlandesa, el cardenal Séan Brady, se disculpó hoy por no haber hecho caso a las víctimas de abusos sexuales por parte de eclesiásticos, lo que calificó como «profunda vergüenza».
«Quiero pedir perdón por las veces que algunos de nosotros hemos estado ciegos ante vuestro miedo, sordos ante vuestros llantos y callados para dar respuesta a vuestro dolor», dijo Brady durante la homilía de una misa oficiada con motivo del 50 Congreso Eucarístico Internacional que se celebra en Dublín.
El cardenal reconoció que el monumento inaugurado el domingo en Dublín en honor a las víctimas es «un recordatorio de aquellos niños y jóvenes heridos por la Iglesia, que primero traicionó su confianza y después no les dio una respuesta adecuada a su dolor«.
Estas disculpas llegan dos días después de que el cardenal Marc Ouellet, representante pontificio en el congreso, se reuniera con víctimas de abusos sexuales por parte de clérigos, a las que pidió perdón en nombre del papa y de la Iglesia y ante las que expresó «vergüenza y remordimiento».
Tras este encuentro, celebrado en un santuario a orillas del lago Lugh Derg con hombres y mujeres de varias diócesis irlandesas que sufrieron abusos por parte de eclesiásticos, Ouellet celebró una misa en la catedral de San Patricio de Dublín donde volvió a pedir perdón en nombre de Benedicto XVI por los casos de pederastia.
El cardenal también reconoció que la respuesta de «algunas autoridades de la Iglesia» para poner fin a estos «delitos» ha sido «a menudo inadecuada e ineficaz».
Las disculpas de Brady se producen un mes después de que él fuese cuestionado en un documental de la cadena británica BBC, que lo acusó de ocultar los abusos sexuales cometidos por el sacerdote Brendan Smyth.
El programa de BBC «This World», emitido el 30 de abril, identificó a Brady como uno de los responsables de la investigación desarrollada en 1975 sobre dos casos de abusos cometidos por Smyth, arrestado en 1994 en la República de Irlanda y encarcelado después por agredir sexualmente a 20 menores, niños y niñas, durante un periodo de más de 40 años. (RD/Efe)