La misión católica ha sido saqueada por la guerrilla islamista
La República Centroafricana no es Malí. No tiene la fuerza de ese país, y la consecuencia es que la guerra y las masacres continúan. Mientras los rebeldes de Seleka siguen avanzando y ayer se hicieron con la capital (Bangui) y la casa presidencial -al tiempo que el presidente Bozizé huía al Congo-, Juan José Aguirre, obispo de Bangassou, y varios cooperantes españoles permanecen en la casa de los combonianos, en Bangui, a escasos metros de la casa presidencial, a la espera de poder regresar a la misión católica que ha sido saqueada por la guerrilla islamista.
Para los mercenarios yijadistas de Sudán y del Chad que se han unido a la Seleka, la consigna es atacar a los católicos, de ahí que Juan José Aguirre esté en el punto de mira, después de que el trabajo realizado por esta misión durante 15 años haya sido totalmente saqueado.
El hermano del obispo, Miguel Aguirre, se hacía ayer eco de las declaraciones de su hermano, que reclama una intervención urgente de la ONU en la zona, para devolver la tranquilidad a sus habitantes, al tiempo que se preguntaba porqué Francia ha intervenido de forma contundente en Mali y no ha hecho lo mismo en Centroáfrica. Según Aguirre, Francia ha enviado un destacamento que ha tomado el aeropuerto con el fin de estar preparados para la repatriación de los ciudadanos europeos, pero no ha intervenido para frenar el avance de la Seleka.
De momento, la población de la zona afectada no está recibiendo ayuda humanitaria porque los caminos están cortados, por lo que el obispo reclama que se abran corredores humanitarios para atender a enfermos y huérfanos.
En cuanto al futuro de la misión en Bangassou, el hermano del obispo explicó ayer que ya se está trabajando desde España para recabar todo tipo de ayuda destinada a la reconstrucción en cuanto sea posible. «Los dos contenedores de ayuda que enviamos en noviembre siguen esperando a poder ser entregados», explicó Aguirre, que recordó a todos los interesados en colaborar que se pongan en contacto con la fundación. Además, se ha abierto una cuenta en el Banco Popular para cuando se pueda reconstruir Bangassou 0075-3060-23-0602652779.