Los pueblos de Oriente Medio soñaron con una nueva era de dignidad, democracia, libertad y justicia social
La Asamblea de Obispos Diocesanos Católicos de Tierra Santa, equivalente a la conferencia episcopal, cree que los cristianos son perseguidos en Oriente Medio pero tanto como lo son los miembros de otras confesiones, incluidas los de las distintas corrientes del Islam.
«No hay duda de que muchos extremistas (en la región) consideran a los cristianos infieles, enemigos, agentes de potencias hostiles extranjeras o que, simplemente, ven en ellos un blanco fácil para la extorsión», dice un comunicado difundido hoy por la Comisión de Paz y Justicia de dicha Asamblea.
El documento, que aborda la situación política y religiosa en la región con motivo de la próxima visita del papa Francisco, indica que la Primavera Árabe a partir de 2011 «ha abierto el camino a los grupos y fuerzas extremistas en nombre de una interpretación política del Islam que está causando estragos en muchos países».
«Sin embargo, en virtud de la verdad, debemos destacar que los cristianos no son las únicas víctimas de esta violencia (…) Los musulmanes seculares (…) están siendo asesinados en este caos», agrega al recordar asimismo que en zonas chiíes «los suníes sean asesinados» y viceversa.
Wadie Abunassar, portavoz de la institución, explicó que la visita del Santo Padre ha despertado mucho interés entre periodistas de todo el mundo sobre la situación de los cristianos en Tierra Santa y en los países de Oriente Medio, y que por ello la Asamblea decidió hacer este manifiesto para poner fin a las especulaciones.
Francisco, que será el cuarto papa en peregrinar a la zona, llegará a la región a finales del próximo mes de mayo para una gira de tres días que le llevará por los lugares santos en Jordania, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) e Israel.
Sobre la situación de los cristianos en la región, uno de los asuntos que Francisco abordará con los mandatarios israelíes, jordanos y palestinos, los obispos de Tierra Santa recuerdan su sufrimiento junto al de otros muchos pueblos.
«Sí, los cristianos son a veces perseguidos precisamente por ser cristianos (…) pero son víctimas junto a otros muchos que sufren y mueren en estos tiempos de muerte y destrucción«, indica la nota en ese sentido, al advertir en particular de la situación en Egipto, Iraq y Siria.
Y reconoce que los conflictos en esos países estallaron porque «los pueblos de Oriente Medio soñaron con una nueva era de dignidad, democracia, libertad y justicia social» y que, bajo los «regímenes dictatoriales» anteriores, «los cristianos vivieron en relativa seguridad».
En línea con este argumento, en un elocuente examen de conciencia, la conferencia episcopal cree que los cristianos deberían haber alzado antes su voz contra las injusticias en esos países y haber exigido reformas.
«Cristianos y musulmanes deben estar juntos contra estas nuevas fuerzas de extremismo y destrucción (porque) todos aquellos que buscan dignidad, democracia, libertad y prosperidad están siendo atacados», insisten ante la nueva situación.
(Rd/Agencias)