La Iglesia española lamenta el atentado y Cañizares anuncia que esta tarde presidirá una oración por las víctimas en la capilla de la sede de Santa Úrsula
(Cameron Doody).- La sinrazón terrorista ha vuelto a golpear Manchester. Lo que debía ser un concierto para niños ha terminado por cobrarse, hasta el momento, al menos 22 víctimas mortales, y 59 heridos. La Iglesia británica ha lamentado el ataque suicida, y ha pedido «que Dios convierta los corazones de todos los que hacen mal«.
El primero en condenar el ataque ha sido el cardenal Vincent Nichols, arzobispo de Westminster, junto al obispo local de Salford, John Arnold, y hasta el portavoz de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo.
La Policía británica ha confirmado la muerte de al menos 22 personas en la explosión registrada en el Manchester Arena, y ha asegurado que se trata de un ataque perpetrado por un suicida. La explosión se produjo sobre las 22,35h, justo después de que haya terminado una actuación de Ariana Grande, la joven cantante estadounidense. Se teme que muchas víctimas hayan sido niños.
«Es con gran pesar que oí las informaciones mediáticas de la atrocidad de la pasada noche, en Manchester», escribió el cardenal Nichols al obispo Arnold, cuyo territorio abarca el estadio donde se produjo el ataque. «Que Dios dé fuerzas y fe duradera a todos los afligidos, heridos y traumatizados», imploró el purpurado. «Que Dios acoja en su presencia misericordiosa todos los que han fallecido. Que Dios convierta los corazones de todos los que hacen mal al entendimiento verdadero de su deseo e intención para la humanidad».
Tras asegurar al obispo de Salford las oraciones y condolencias de todos los obispos de Inglaterra y Gales, el cardenal Nichols dio voz en su carta a un último lamento. «Nosotros, también, lloran esta pérdida de vidas. Oramos por el eterno descanso de todos los fallecidos».
Por su parte, el obispo John Arnold ha recurrido a Twitter para condenar el ataque. «Los ciudadanos de Manchester y los miembros de la comunidad católica están unidos en condenar el ataque a la multitud en el estadio», declaró el obispo en sus dos primeros tuits. «Este ataque no puede tener justificación. Doy gracias a los servicios de emergencia por su respuesta tan pronto y rápido que ha salvado vidas».
«Nos unimos en la oración por todos ellos que han fallecido y por los heridos y sus familias y por todos los que han sido afectados por esta tragedia. Tenemos que comprometernos a trabajar juntos, a ayudar a las víctimas y sus familias y a construir y fortalecer a nuestra solidaridad comunitaria«, continuó el obispo de Salford. Sentimientos todos estos de los que ha hecho eco la propia Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales, que ha mandado otro mensaje a través de la misma red social prometiendo su cercanía y oraciones por los muertos y heridos y sus familias y amigos.
Por último, el portavoz de los obispos españoles, José María Gil Tamayo, quien acaba de ofrecer también en Twitter, y en nombre de la Iglesia española, su «unión» con la Iglesia británica y sus «oraciones y solidaridad» para las víctimas de tan «repulsivo» atentado.
Por su parte, el cardenal Arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, Gran Canciller de la Universidad Católica de Valencia (UCV), presidirá esta tarde a las 20 horas una oración por las víctimas del atentado terrorista de anoche en Manchester y la paz en Venezuela.
La oración, que se celebrará en la capilla de la sede de Santa Úrsula (Guillem de Castro, 94), está convocada por el vicerrectorado de Pastoral y Evangelización, desde donde han realizado un llamamiento a la comunidad universitaria a participar, así como a toda la sociedad en general.
La celebración quiere mostrar la «solidaridad y cercanía» ante la «gravedad de la situación, el sufrimiento y dolor» de los venezolanos y de las víctimas de cualquier tipo de terrorismo, en especial de las víctimas de los últimos atentados en Europa y Siria.
Tal y como ha hecho el Papa Francisco, «pediremos que Nuestro Señor derrame los dones de la paz para que termine el sufrimiento, el dolor y la violencia», han señalado desde el vicerrectorado de Pastoral y Evangelización.
