El Instituto Robert Koch (RKI), encargado de vigilar la evolución de la pandemia en Alemania, ha informado el día domingo 10 de mayo que el factor de reproducción, que no es más que el ritmo de propagación del virus, se encuentra por encima de 1, lo cual implica que de media cada infectado contagia a al menos otra persona.
Todo indica que el número de infecciones está aumentando en el país.
Las restricciones en la vida pública en Alemania por el coronavirus, se han ido levantando en desescalada, iniciando el 20 de abril con una primera tanda de reaperturas y ampliado la semana pasada.
«Debido a las oscilaciones estadísticas, incrementadas por las cifras en general bajas, todavía no se puede evaluar si la tendencia a la baja observada durante la última semana en cuanto a nuevas infecciones continuará o si se va a dar un nuevo aumento de casos», precisa el informe.
En todo caso, la subida de dicho índice hace necesario «observar con mucho detenimiento» el desarrollo en los próximos días, subraya el RKI.
No es un número fijo porque cambia a medida que se modifica nuestro comportamiento o se desarrolla la inmunidad.
El balance diario de 22 muertos es la cifra más baja de fallecidos por coronavirus registrada en Alemania desde marzo y es inferior a los 26 decesos contabilizados el domingo. Los 357 contagios registrados en las últimas 24 horas también son inferiores a los 667 positivos contabilizados el día anterior. Con los nuevos datos, el balance asciende a 169.575 personas contagiadas y 7.417 víctimas mortales por coronavirus.
Alemania es el séptimo país del mundo con más casos registrados, según las cifras de la universidad Johns Hopkins.
Alemania ha ganado elogios por su respuesta al brote. Las pruebas masivas y las restricciones de cuarentena efectivas han ayudado a mantener el número de muertos mucho más bajo que en otros países europeos.
Pero algunos han criticado la decisión de Merkel de relajar esas medidas.
La canciller impuso un «freno de emergencia», exigiendo a las autoridades locales que vuelvan a imponer restricciones si los casos superan el umbral de 50 por cada 100.000 personas.
El Gobierno alemán y los estados federados acordaron aliviar las restricciones, aunque con el compromiso de introducir nuevas medidas restrictivas en aquellas circunscripciones en las que se detecten más de 50 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes en un plazo de siete días.
Las protestas del sábado se llevaron a cabo en Múnich, donde aproximadamente 3.000 personas se agruparon –sin respetar la distancia de seguridad en muchos casos- para protestar por las restricciones impuestas en el país.
Protestas en Alemania
El informe del repunte de contagios se publicó poco después de haberse llevado a cabo diferentes manifestaciones para pedir la finalización total de la cuarentena.
Mientras que algunos temen que el país alivie sus restricciones demasiado pronto, otros protestan contra la cuarentena extendida.
Un pequeño número de personas salió a las calles en las últimas semanas, pero el sábado aumentó a miles de manifestantes que se reunieron en ciudades de todo el país, incluidos Berlín, Fránkfurt, Múnich y Stuttgart.
La policía en Berlín arrestó a unas 30 personas afuera del Reichstag (Parlamento) el sábado por no obedecer las medidas de distanciamiento social.
Las autoridades dicen que algunos manifestantes, entre los que se incluían grupos de extrema derecha, arrojaron botellas a los oficiales de policía durante las protestas.
Los testigos de la agencia DPA señalaron que los manifestantes, entre los que había personas que se oponen a la aplicación de vacunas, acusaron a las autoridades del ámbito político y también a los médicos de generar pánico y de recortar los derechos básicos de la población.
