Mueller es amigo personal del Papa y Bertello, del cardenal Bertone
Sin prisa pero sin pausa. Benedicto XVI y su mano derecha, el cardenal Secretario de Estado, Tarcisio Bertone, están remodelando en profundidad la Curia romana. Ahora le toca el turno a la Congregación de Obispos, la segunda más poderosa de la maquinaria, vaticana. Su todopoderoso presidente actual, cardenal Re, será sustituido por monseñor Bertello, actual Nuncio de su Santidad en Italia, según cuenta el prestigioso vaticanista italiano Marco Tosatti. Y el cardenal Kasper podría ser sustituido en breve por monseñor Mueller al frente del Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos.
El periodista de La Stampa asegura que el relevo se producirá antes de la fiesta de Pascua del próximo año. De hecho, el purpurado lombardo cumplirá el 30 de enero de 2010 los 76, alcanzado así el año de prórroga en su puesto, que Benedicto XVI suele conceder a sus colaboradores.
Le sustituiría monseñor Giuseppe Bertello, un brillante diplomático que, desde el 19 de diciembre de 2006 ejerce de Nuncio en Italia. El todavía embajador papal nació en 1942 y está considerado un hombre de Bertone, el número dos de la Curia. Se conocen desde hace muchos años, ambos son del Piamonte y amigos, por lo que su candidatura tiene todas las de ganar.
Eso haría que ni siquiera fuese un obstáculo para su acceso a la presidencia del dicasterio el hecho de que el eventual número uno y el ya número dos, monseñor Monteiro, pertenezcan a la carrera diplomática.
Por otra parte, insistentes rumores que circulan por Roma colocan a monseñor Gerhard Ludwig Mueller como próximo presidente del Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos, que preside el también purpurado alemán Walter Kasper.
Mueller, de 61 años, podría tomar posesión de su cargo a finales del actual mes de noviembre. Es obispo de Ratisbona desde 2002 y responsable del ecumenismo en la conferencia episcopal alemana. Amigo personal del Papa Ratzinger, cuya opera omnia publicó y al que conoce desde hace décadas.
