Una vez que concluyan las fiestas, el abeto será usado para fabricar con su madera juguetes para niños
Benedicto XVI oficiará hoy en la basílica de San Pedro del Vaticano la tradicional Misa del Gallo, que en esta ocasión no comenzará a medianoche sino dos horas antes (a las 21.00 GMT) para evitar que el anciano Pontífice, de 82 años, se fatigue.
Desde hace varios días ya no quedan entradas -que son gratuitas- para asistir a la misa, en la que participarán numerosos cardenales, obispos y otros miembros de la Curia Romana, y en la que seis niños de varios países harán una ofrenda floral al Niño Jesús.
Teniendo en cuenta que la Misa del Gallo durará varias horas, y como ya es habitual -siempre para no fatigar al anciano Pontífice- la Misa de Navidad la celebrará mañana en la basílica de San Pedro el cardenal secretario de Estado, Tarcisio Bertone.
El Papa Ratzinger regresará al recinto vaticano mañana, 25 de diciembre, a mediodía, para leer el tradicional Mensaje de Navidad e impartir la bendición «Urbi et Orbi» (a la ciudad de Roma y a todo el mundo), que será transmitido por un centenar de televisiones de más de medio centenar de países.
Hoy, antes de la Misa del Gallo, el Papa encenderá a media tarde el Cirio de la Paz en la ventana de su apartamento, que da a la plaza de San Pedro.
Normalmente no pronuncia ninguna frase y se limita a rezar unos segundos por la paz en el mundo.
Antes del encendido se inaugurará el tradicional Portal de Belén que todos los años se levanta delante del obelisco de la plaza de San Pedro del Vaticano, junto a un gran abeto navideño.
El Portal está de nuevo ambientado en la Belén de aquella época. Ocupa una superficie de 300 metros cuadrados y un frente de 25 metros cuadrados, según informó el Vaticano.
Entre los elementos arquitectónicos de este año figuran restos de una muralla ciudadana y humildes estructuras ligadas a la vida de los campos y a la pesca.
El Nacimiento cuenta con una veintena de figuras, todas a tamaño natural, procedentes del Portal de Belén que fue realizado en 1842 en la iglesia romana de San Andrés della Valle por San Vicente Palotti.
Al lado del Portal ha sido colocado el tradicional árbol de Navidad, que este año ha regalado al Papa la región belga de Valonia y que fue inaugurado el pasado día 18 por Benedicto XVI.
Se trata de un inmenso abeto rojo de 30 metros de alto y 14.000 kilos de peso. Tiene un centenar de años y sus ramas inferiores llegan a extenderse hasta los diez metros.
Además de este árbol, el pasado día 16 fue inaugurado en el Aula Pablo VI del Vaticano, donde el papa Benedicto XVI celebra las audiencias públicas de los miércoles y otros eventos, un Nacimiento de barro y estaño, creado por artesanos del Estado de México.
Este mismo estado mexicano también ha regalado al Vaticano un árbol de Navidad y un «árbol de la vida», que han sido colocados asimismo en el Aula Pablo VI del Vaticano.
Una vez que concluyan las fiestas, el abeto será usado para fabricar con su madera juguetes para niños, así como bancos de parques y de escuelas, en la línea ecologista que predica Benedicto XVI.
La tradición de instalar un Belén en la plaza de San Pedro, junto al obelisco, comenzó en 1982 por deseo del papa Juan Pablo II y fue confirmada por Benedicto XVI.
(RD/Efe)