"Los papeles secretos de Benedicto XVI", que hoy sale a la venta en Italia, desvela la preocupación de la Santa ante el final del terrorismo en España y el papel de la Iglesia vasca
(Jesús Bastante).- El secretario de Estado vaticano, Tarcisio Bertone, vetó el uso del edificio de la Nunciatura de Madrid como sede para la negociación Gobierno-ETA de cara a la tregua declarada posteriormente por la banda. Una nueva filtración, esta vez recogida en el libro «Los papeles secretos de Benedicto XVI«, que hoy sale a la venta en Italia, desvela la preocupación de la Santa ante el final del terrorismo en España y el papel de la Iglesia vasca.
Según el documento, Bertone indicó al nuncio Renzo Fratini, que tanto Roma como el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, eran contrarios a la utilización de la sede. Roma también pedía a Fratini tener en cuenta la opinión del entonces vicepresidente, «el honorable Rubalcaba«, y del ex ministro Jaime Mayor Oreja, para escuchar su opinión de cara a futuras peticiones de este tipo. La propuesta, que surgió del entorno abertzale, habría de contar con el beneplácito de Iglesia, Gobierno y oposición, lo que tampoco se produjo.
Por ultimo, Bertone incide ante Fratini que «sería necesario poner a la mencionada organización, como condiciones previas, la entrega de las armas y la petición de perdón por todos los crímenes cometidos durante varias décadas de lucha terrorista armada».