"No se ocupa de casos individuales, no ejerce la supervisión, y no es un órgano de toma de decisiones"
La Pontificia Comisión para la Protección de Menores comunicó hoy que las Iglesias locales y conferencias episcopales han recibido muy bien la misión que les encomendó el papa en diciembre de 2013 de evitar en el futuro casos de religiosos pederastas y para tutelar a las víctimas.
La comisión se ha reunido por segunda vez en asamblea plenaria desde su creación del 9 al 11 de octubre y en estos días se dedicaron a escuchar y discutir los informes presentados por los grupos de trabajo formados en la primera sesión de febrero, según informaron en una nota.
Desde su creación, los miembros de la comisión han participado en talleres, conferencias y seminarios sobre la protección de los menores en Irlanda, Reino Unido, Francia, Nueva Zelanda, las Islas del Pacífico y recientemente en Filipinas y que el próximo mes abordarán estos temas con los obispos de Centroamérica, añade.
En este periodo -dice la nota- «su labor ha sido recibida de manera muy positiva por las iglesias locales de todo el mundo y las Conferencias Episcopales».
Esta comisión recordó que «no se ocupa de casos individuales, no ejerce la supervisión, y no es un órgano de toma de decisiones».
La comisión creada por deseo de Francisco – añade la nota – se ha dividido en grupos de trabajo para profundizar sobre varios temas: Directrices para la salvaguardia y la protección de los menores; la curación y atención a las víctimas, los supervivientes y sus familias; la formación de los candidatos al sacerdocio y a la vida religiosa y la educación de los superiores de la Iglesia; la educación de las familias y las comunidades; Teología y espiritualidad y normas canónicas y civiles.
La Comisión tiene previsto celebrar su próxima Asamblea Plenaria, en febrero de 2016.
Ésta está presidida por el cardenal Patrick Sean O’Malley y entre sus miembros hay dos víctimas de abusos en su niñez por parte de curas: la irlandesa Marie Collins y el inglés Peter Saunders.
También forman parte de ella el religioso colombiano Luis Manuel Ali Herrera, director del Departamento de psicología del seminario de Bogotá; el teólogo argentino Miguel Yáñez; el filipino Gabriel Dy-Liacco, psicoterapeuta; el neozelandés Bill Kilgallon, director de la Oficina profesional de la Iglesia católica de Nueva Zelanda o la monja de Zambia Kayula Gertrude Lesa, experta en protección de menores.
También la monja sudafricana Hermenegild Makoro, la australiana Kathleen McCormack, experta en servicios para la familia, y la estadounidense Krysten Winter-Green, que se ha ocupado del tratamiento de curas responsables de abusos, entre otros.
(RD/Agencias)