Cando un cristiano se pone triste, significa que se ha alejado de Dios
(J. B.).- «Pidamos por nuestros hermanos que se han alejado de la fe, para que, a través de nuestra oración y testimonio evangélico, puedan redescubrir la belleza de la vida cristiana». Francisco ha dedicado el «Video del Papa» de este mes a aquellos cristianos que han abandonado la Iglesia o, simplemente, no creen.
«En esos momentos no hay que dejarlo solo. Debemos ofrecerle la esperanza cristiana con la palabra sí, pero más con nuestro testimonio, con nuestra libertad, con nuestra alegría«, señala Bergoglio en el vídeo.
«No olvidemos nunca que nuestra alegría es Jesucristo, su amor fiel e inagotable«, añade el Papa, quien señala que «cuando un cristiano se pone triste, significa que se ha alejado de Dios». Así, el Papa muestra la importancia de transmitir alegría como un modo de acompañar a las personas que, por cualquier circunstancia, se han apartado del mensaje del evangelio y de las enseñanzas de Cristo. Para resaltar su petición, Bergoglio asegura que la tristeza en un cristiano es una señal evidente de que se ha alejado de Jesús.
Con más de 2.200 millones de cristianos alrededor del mundo, Francisco se propuso ir más allá de la realidad concreta de la iglesia católica y volvió a llamar la atención para acompañar a quienes puedan estar viviendo una crisis de fe. Entre algunos de sus pedidos, el Papa también instó a ofrecer un camino de esperanza a través del testimonio propio y el ejercicio de la libertad.
«La preocupación manifestada por el Papa Francisco no es nueva. En 2013, en su encíclica Lumen Fidei, prolongando el trabajo del Papa Benedicto XVI, Francisco alertó sobre los peligros de la pérdida de la fe. ‘Es urgente recuperar el carácter luminoso propio de la fe, pues cuando su llama se apaga, todas las otras luces acaban languideciendo’, nos expresaba en el inicio del documento. En el Evangelio de San Juan, Jesus dice: « Yo he venido al mundo como luz, y así, el que cree en mí no quedará en tinieblas » (Jn 12,46). La fe en Jesucristo tiene la capacidad de iluminar toda nuestra existencia. Es como una «luz en el sendero» que nos conduce hacia los verdes pastos y, aun en medio de las dificultades, rebosa nuestra copa de alegría (Salmo 22/23)», comentó el P. Frédéric Fornos, SJ, Director Internacional de la Red Mundial de Oración del Papa y el Movimiento Eucarístico Juvenil (MEJ).