Las últimas 24 horas han sido fantásticas en la Volvo Ocean Race, la regata por equipos alrededor del mundo más dura y es que los representantes de Holanda, los dos ABN AMRO 1 de Mike Sanderson y el gemelo, el ABN AMRO 2 patroneado por Sebastien Josse, han batido ambos los records de velocidad que hasta hacía unos meses lo poseía el MOVISTAR.
El record se establece en 24 horas y lo fija la World Sailing Speed Record Council. Consiste en coger la mejor distancia y las mejores 24 horas, la punta de velocidad y el número de millas navegadas. El ABN AMRO 1 recorrió 538 millas y una punta de 22.40 nudos, el ABN AMRO 2 por su parte, recorrió 533 millas y una punta de 22.20 nudos. La anterior la tenía el MOVISTAR con 530 millas y 22.10 nudos.
Cuando José de Espronceda, el poeta romántico español del siglo XIX, escribió uno de los poemas más bonitos que sobre la mar y los marinos en La Canción del Pirata, nunca unos versos se acercaron tanto a una realidad. El poema comienza:
«Con diez cañones por banda, 
viento en popa, a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
un velero bergantín…»
Modificando un poco el poema a la época actual:
«Con diez tripulantes en cubierta,
viento en popa a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
un velero holandés…»
Por otra parte, el Movistar está prácticamente reparado según fuentes desde la localidad lusa de Portimao. Este martes, el director general del Movistar y presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo, Pedro Campos, se dirigirá en rueda de prensa desde Madrid para informar a la prensa y aficionados de la regata la suerte del representante español. Todo indica que se harán a la mar el jueves y que si van bien podrán llegar entre el 20 o 21 antes de que de comienzo la segunda regata costera puntuable en Ciudad del Cabo el día 26 diciembre.
Dicha posible decisión es muy arriesgada porque llegaría con la lengua fuera, la tripulación muy fatigada con 20 días de navegación donde se estiman que cada tripulante pierde alrededor de 4,5 kilos de masa muscular. Seguramente por la comida liofilizada (comida deshidratada igualita a la que comen los astronautas) comida que odia el simpático proa alicantino del Movistar, Pepe Ribes.
