«Big Mac» sigue los pasos de George Foreman

Apenas 19 minutos antes de cumplir los 47 años, John McEnroe selló con una victoria su regreso al circuito profesional de la ATP, donde desembarcó con su habitual ironía e inspirado por la figura de campeones veteranos como el boxeador George Foreman.

Doce años después de disputar su último partido, «Big Mac» retornó al circuito en el cuadro de dobles del torneo de tenis de San José y se impuso junto al sueco Jonas Bjorkman por un doble 6-3 a los australianos Wayne Arthurs y Stephen Huss, segundos favoritos, en la noche del miércoles.

«El viejo maestro quería enseñar un par de trucos a los jovenes muchachos», bromeó McEnroe, que se confesó inspirado por Foreman, que volvió a ser campéon del mundo de los pesos pesados con 44 años, y Chris Chelios, capitán de la selección estadounidense de hockey hielo en los Juegos Olímpicos de Turín. «Tiene 44 y parece esculpido en granito», dijo el ex número uno.

Fiel a su estilo, McEnroe aseguró incluso sentirse en mejor forma que entre 1979 y 1984, periodo en el que ganó siete títulos del Grand Slam. El neoyorquino ganó 77 títulos en individuales y otros 77 en dobles. De hecho, se retiró tras caer formando pareja junto con el alemán Boris Becker en las semifinales del torneo de Rotterdam en 1994.

El jugador zurdo reconoció que su regreso al circuito pretende atraer la atención sobre el languideciente dobles, donde también alarga su interminable carrera otra leyenda, su compatriota Martina Navratilova. McEnroe es el más veterano tenista de la ATP, pero sigue por debajo de la ex número uno del mundo, que en octubre cumplirá 50 años.

Que el regreso del mayor «rebelde» que haya habido en el tenis coincida con su cumpleaños es pura casualidad, señaló el jugador, a quien poco antes de medianoche los organizadores obsequiaron con una gran tarta de aniversario mientras los 7.158 espectadores que permanecían en la cancha cantaban el «happy birthday».

Comportamiento impecable

El comportamiento del colérico McEnroe durante el partido fue impecable, y parece que los ataques de rabia que le hicieron famoso los escenifica ya únicamente contra amigos como el alemán Boris Becker o el croata Goran Ivanisevic en partidos de exhibición del circuito de veteranos.

McEnroe ganó 12,5 millones de dólares con el tenis y tras finalizar su carrera aprovechó su «incontinencia verbal» como exitoso comentarista de televisión, galerista de arte o músico. El tenista, que nació en 1959 en la ciudad alemana de Wiesbaden, donde estaba destinado su padre, oficial de avición del ejército estadounidense, afronta ahora una segunda etapa en el circuito profesional. Su segundo partido le medirá en cuartos de final con el australiano Ahsley Fisher y el estadounidense Tripp Phillips.

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