José Rosado.- El escándalo por la compra de árbitros ha salpicado a los principales equipos de la Serie A italiana y más concretamente a la Juventus de Turín. La Vecchia Signora parece abocada al descenso a la segunda división pero, sobre todo, abocada a una bancarrota tras la pérdida de contratos televisivos y publicidad.
En la fiscalía de Nápoles se trabaja a destajo para esclarecer todos los detalles que han rodeado a Luciano Moggi, director general de la Juventus desde 1994. Tras publicarse en la prensa italiana, las conversaciones que Moggi había mantenido con ciertos responsables arbitrales, la justicia comenzó a escarbar en un entramado donde jugadores, prensa, directivas y federaciones estaban implicados en el amaño de partidos, el cobro ilegal de plusvalías y diferentes actividades ilegales.
Moggi había aprovechado la situación de su hijo Alessandro, como dirigente del Gea –una sociedad de representación de jugadores- y de Chiara Geronzi, hija de uno de los banqueros más importantes de Italia, para presionar a los diferentes clubes del Calcio acosados por las ingentes deudas contraídas tras el ‘boom’ televisivo a fin de obtener cuantos jugadores interesasen.
Además, Moggi había entablado contactos con el árbitro más importante de Italia, Máximo De Santis y con encargados de las designaciones arbitrales para componer los resultados clasificatorios de una Liga que, año tras año, siempre ganaba la Juve.
Y es que éste era el resultado de las actividades de Moggi. Durante su mandato en la Vecchia Signora, el equipo ganó siete scudettos. Todo un récord para una liga tan competitiva como el Calcio italiano.
La Justicia italiana parece ahora hacer pagar todas las ilegalidades de Moggi por lo que la Juventus perderá su dos últimos títulos ligueros y tendrá que descender a la segunda división, si no algo peor. El descenso no sólo es un varapalo a la reputación e identidad del equipo de la familia Agnelli, sino un espaldarazo a las cuentas de la Vecchia Signora.
REBAJAS DE ENERO EN TURÍN
El equipo de Turín tendrá que hacer frente a las deudas millonarias que la pérdida de patrocinadores provocará, por lo que sus jugadores ya empiezan a buscar nuevo equipo para la próxima temporada. Y es que la Juve parece un álbum con algunos de los mejores jugadores del planeta, por lo que los equipos de toda Europa ya han comenzado a mirar al equipo italiano, como si fuera una tienda en liquidación.
Su entrenador, Fabio Capello, se ha despedido ya de la directiva y, aunque acaba contrato hasta el próximo año, su elevado salario hace pensar que no continuará el próximo año; además, el apocamiento de pasar una temporada en la Serie B para un entrenador de su perfil tampoco ayuda para que continúe en el equipo. ¿El destino?, todavía es pronto para saberlo, pero varios clubes se han interesado por él, principalmente el Real Madrid, quien lleva siguiéndole desde hace años y que podría llevarle al banquillo del equipo blanco una vez conformada la directiva.
Otro jugador por el que se ha interesado el Madrid en varias ocasiones ha sido el mediocentro Emerson da Rosa, al que la Juve ya le “robó” en el 2004, cuando el equipo entonces presidido por Florentino Pérez estuvo a punto de ficharlo.
La principal estrella de la Juve, el checo Pavel Nedved, ha anunciado que, de descender el equipo a segunda división, dejará el fútbol tras el Mundial de Alemania. De posibles marchas es todavía difícil hablar, son muchos los jugadores de primer nivel que militan en la Vecchia Signora, por lo que es complicado que la mayoría de ellos acepte jugar el segunda con la consiguiente reducción de salario.
En la portería, Gianluigi Buffon es una baja casi segura, aunque tanto Abbiati como Bonnefoi es casi seguro que se quedarán, el primero porque ha sido suplente tanto de Dida en el Milan, como del propio Buffon en la Juventus y el descenso le permitiría minutos; y el francés porque, con tan sólo 22 años, puede disfrutar de algunos partidos en una división inferior.
En defensa resulta más complicado; tan sólo a Zambrotta le han unido a las filas del Inter, junto con el delantero David Trezeguet. El resto son casi todos jugadores de primer nivel por lo que su permanencia en un equipo de segunda división resulta difícil de concebir. Cannavaro, Kovac, Zebina y Thuram seguramente abandonarían el club.
Además de los anteriormente citados, el sueco Zlatan Ibrahimovic tiene una oferta del Milan, mientras que el francés Vieira podría regresar al Arsenal; tan sólo Del Piero es la gran duda, si preferirá un cambio de aires o si, por el contrario, se mantendrá en el equipo donde lleva 13 años. Lo único claro de todo este asunto es que la Juve ha iniciado ya las rebajas de enero.
