La `otra´ España espera ya a Arabia

(Agencias).- La selección española cierra hoy la primera fase del Mundial de Alemania ante la modesta Arabia Saudí con la idea de redondear la versión ofrecida en los dos encuentros anteriores, finiquitar la primera plaza del grupo y prolongar el estado de excepción que rodea el entorno nacional.

España, que ha completado una clasificación plácida, afronta ante los árabes su última participación en la fase de grupos con la idea de mantener la moral ante el inminente cruce de octavos, una eliminatoria directa en la que el combinado nacional suele sufrir vértigo pese a las buenas sensaciones ofrecidas hasta ahora.

En el cuadro nacional todo rueda a la perfección y el seleccionador, Luis Aragonés, tendrá la oportunidad de modificar el once con un doble objetivo. De un lado dar descanso a los titulares para que afronten los octavos en plenas condiciones y del otro conceder minutos al resto de la expedición para mantener activos a todos los internacionales, consciente de que en cualquier momento pueden ser importantes si España quiere alargar sus aspiraciones.

Siete debutantes en Alemania

De este modo, Aragonés revolucionará el once titular y no repetirá ni uno sólo de los que salió de inicio en los dos anteriores encuentros. El seleccionador ofrecerá la portería a Cañizares, y la defensa a Salgado, Marchena, Juanito y Antonio López. En la media formarán Albelda, Iniesta y Cesc, y arriba estarán Joaquín, Reyes y Raúl.

Sólo cuatro de ellos han disputado algunos minutos en este Mundial. Albelda, Raúl y Cesc fueron los cambios de Aragonés en el primer acto, y en el segundo repitieron los dos segundos y además se estrenó Joaquín. Sólo el centrocampista del Arsenal, que vio una amarilla ante Túnez, podría verse privado de los octavos en caso de ver una nueva amonestación.

España debe atestiguar la filosofía de juego ofrecida hasta ahora, aunque no estén ni Xavi Hernández ni Xabi Alonso, dos de sus motores, ante una selección que salió goleada de su último enfrentamiento ante Ucrania y que aspira el partido con la idea de defender su dignidad porque sus posibilidades de clasificación son remotas. Para ello necesitaría vencer a España por goleada y esperar que Ucrania no lo hiciera ante Túnez, y sacar la calculadora para el ‘goal-average’.

De todos modos, la aventura mundialista parece haber llegado a su fin para los del brasileño Marcos Paquetá, experto en amargar a la selección española en categorías inferiores puesto que al frente de Brasil se impuso en las finales de los Mundiales sub 17 y sub 20 de 2003.

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