El Barcelona se presentó ante su público con una goleada ante Osasuna (3-0). Un ‘doblete’ de Etoo y otro gol de Messi dan el liderato al vigente campeón, eso sí, compartido con un sólido Valencia que ganó al Atlético en el Calderón (0-1) con un solitario gol de Villa.
El Valencia se lleva el botín y el Atlético otra desilusión
El Atlético de Madrid cayó en el Vicente Calderón ante el Valencia por 0-1 en el estreno de Javier Aguirre en el feudo rojiblanco. El conjunto ché consiguió sumar los tres puntos gracias a un solitario gol de Villa, que en el minuto 7 aprovechó un despiste de la zaga atlética para empujar a gol un servicio de Vicente desde la izquierda. Los rojiblancos intentaron igualar el partido pero no tuvieron suerte de cara al gol. La entrada de Agüero tras el descanso no fue suficiente para evitar la derrota, aunque la calidad del delantero argentino se dejó notar.
Los aficionados atléticos volvieron a casa con el sabor amargo de la derrota tras presenciar el estreno del proyecto Aguirre en el Vicente Calderón. Con muchas caras nuevas en el once y en el banquillo, el conjunto rojiblanco se topó con uno de los peores enemigos que te puedes encontrar por tierras españolas. El Valencia de Quique Sánchez Flores demostró una vez más su solidez y se llevó los tres puntos con más oficio que brillantez, aprovechando el fallo del rival y minimizando los errores propios.
Villa aprovechó el descuido
Nada más comenzar, el Valencia cobró el premio de la noche. Un contragolpe rápido pilló a Valera, sustituto del sancionado Seitaridis, fuera de su demarcación y Vicente aprovechó el pasillo para poner en bandeja el gol a Villa, siempre oportuno y preparado para llegar a tiempo a su cita con el gol.
El tanto se dejó notar en el rendimiento de los jugadores rojiblancos durante la primera media hora y en la grada, más pendiente de ajustar cuentas con Pablo en forma de silbidos que del juego de su equipo. El nerviosismo de los colchoneros era patente, con acciones demasiado trompicadas y queriendo finalizar las jugadas de ataque por la vía rápida. En la portería contraria, el Valencia también ponía velocidad al asunto pero causando mayor sensación de peligro. El conjunto ché tiene dinamita arriba y cualquier descuido puede terminar en tragedia.
Analizando el potencial valencianista cabe deducir que su partido en el Calderón estuvo por debajo de sus posibilidades reales. La pelota fue del Atlético y las ocasiones también, como la que protagonizó Mista mediada la primera parte con un disparo que se marchó rozando el poste. Fue lo único que hizo el ex delantero del Valencia, que dejó su lugar a Agüero tras el descanso.
El ‘Kun’ es especial
La irrupción del ‘Kun’ en el partido fue la mejor noticia de la noche para los seguidores locales. El argentino es un jugador diferente y, aunque Aguirre se empeñe en dejarle en el banco, Agüero debería jugar por decreto en su equipo. Suyas fueron las mejores acciones de una segunda mitad marcada por el conservadurismo del Valencia y la poca suerte de cara al gol del Atleti, que dispuso de alguna ocasión de esas que no se pueden desaprovechar si quieres luchar por estar arriba.
Junto al ‘Kun’, otro de los que se dejó ver fue Petrov. El búlgaro hizo muchas veces la guerra por su cuenta y sigue sin materializar las ocasiones que genera. De qué sirve la potencia sin control, como rezaba un anuncio.
Con el paso de los minutos, el partido fue degenerando en una guerrilla de patadas. Costinha dejó su sello con un ‘mordisco’ al tobillo de Villa que se quedó en un susto. La dureza del portugués es la única noticia que tenemos del fichaje rojiblanco. Su asociación con Luccin fue imperfecta y Maniche pide paso con intermitentes. Las malas formas se contagiaron y Moretti se autoexpulsó con una patada sin sentido a Valera que le costó la roja. Tampoco terminó el partido Fernando Torres, a quien Medina Cantalejo le mandó a la ducha sin cargos tras un ‘malentendido’ con Cañizares.
En los minutos finales, el Atlético rozó el empate que se había merecido a tenor de lo acontecido sobre el terreno de juego pero la suerte le fue esquiva, tanto en un remate de Agüero que Ayala salvó bajo palos como en un balón cruzado de Galletti que no encontró rematador. Al final, el Valencia se llevó el botín de los tres puntos del Calderón y el Atlético estropeó el fin de semana a sus ‘sufridores’.
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El Barça se pasea ante Osasuna de la mano de Etoo
La vida sigue igual. Dos jornadas han sido suficientes para que el Barcelona haya dejado claro que es el máximo favorito para repetir título de Liga y que la derrota en la final de la Supercopa europea fue un accidente que los grandes equipos tienen muy de vez en cuando. Este sábado la víctima fue Osasuna. El Barça le goleó (3-0) con un gran partido de Samuel Etoo, autor de dos goles y que ‘regaló’ el tercero a Messi.
Lo cierto es que al campeón, que se presentaba ante su afición en la Liga, le sobró toda la segunda parte porque a los 36 minutos de partido ya ganaba por el definitivo 3-0. El partido se puso de cara muy pronto para los jugadores de Frank Rijkaard. En el primer minuto de juego Deco, Ronaldinho y Etoo regalaron a sus aficionados una preciosa jugada que el actual Pichichi culminó de maravilla. Deco y Ronaldinho hicieron una pared espectacular en la frontal del área y el pase de la muerte del ‘Balón de Oro’ lo aprovechó Etoo para abrir el marcador cuando muchos abonados culés no se habían sentado en sus asientos.
El propio Etoo fue el autor del segundo tanto en el minuto 26. La zaga azulgrana envió un balón largo, Corrales no pudo despejar y Etoo recogió el balón para levantárselo a Ricardo y poneer el 2-0 en el marcador. Messi cerró la goleada del Barça en el minuto 36 tras otra buena jugada de Etoo que había provocado el fallo del meta Ricardo.
La segunda parte no tuvo historia. El Barça levantó el pie del acelerador y Rijkaard empezó a pensar en el partido de Liga de Campeones del martes. Deco, Ronaldinho y Zambrotta tuvieron minutos de descanso y fueron sustituidos por Iniesta, Giuly y Oleguer.
Por su parte, Osasuna dejó muy mala impresión en el Camp Nou. No tiró a puerta ni se acercó a la meta de Víctor Valdés en toda la primera mitad. Soldado estuvo desaparecido y Raúl García poco pudo hacer. Dos derrotas en dos partidos y la cosa no pinta bien. Todo lo contrario que el Barcelona.
