No es extraño que se produzcan cada vez más casos de «trasfuguismo» en el mundo del deporte. Recuerden a Marc Coma, que cambió su KTM por subirse a un coche. ¿Se imaginan ahora a Valentino Rossi conduciendo un coche de rally? Pues volverá a repetirse, pues el italiano tiene previsto subirse a los mandos de un Subaru tras inscribirse en la penúltima prueba del Mundial de Rallys.
Pues vayan haciendo hambre, pues será el 17 de noviembre cuando recorra los circuitos de Nueva Zelanda, y probablemente participará habiéndose coronado como el rey de la MotoG. Para el piloto estrella de la máxima competición de motociclismo va a ser una experiencia alternativa y espectacular. A sus 27 años y después de haberlo ganado todo en las motos, vuelve a probar el placer de competir como piloto de rally, pues el italiano ya lo hizo en 2002, aunque en esta ocasión espera superar el primer día de competición, algo que no ocurrió en 2002 durante su participación en Gran Bretaña porque no pudo superar la presión de los duros y embarrados terrenos y tuvo que retirarse.
