En vísperas del esperado gran clásico del fútbol español, los ‘piques’ entre ambos equipos está servido. Y quizá aliente un partido que llega con la presión sobre el campeón, más que nada por la dura derrota del Barcelona en la Liga de Campeones, y la onírica sensación triunfalista del Real Madrid que se cree vencedor antes de haber disputado ni un sólo minuto. Vender la piel antes de matar al oso puede traer muchos problemas.Lo cierto es que los dos conjuntos se juegan mucho en este partido, y ninguno quiere dejar escapar la oportunidad de perder tres puntos, y sobre todo, menos ante el gran rival. Por eso ya están caldeando el encuentro.
para cotar las críticas, el barcelonista Ronaldinho insiste, a dos días del gran clásico, que continúa siendo el mismo. Pero si las suaves palabras del astro brasileño no son suficientes, el portero Víctor Valdés fue mucho más duro con los medios de comunicación: ‘Manipulan para cambiar la situación real’.
Admite el brasileño su extrañeza por determinados comentarios que se vierten:
«Yo no he cambiado en nada, la gente busca algo, pero no me enfada todo esto, porque yo continuo siendo el mismo. Contra el Sevilla marqué dos goles y se decía que estaba muy bien, tres días después perdemos en Londres y se dice que estoy mal de forma. Hay que demostrar en cada partido que estamos bien. Tenemos una buena oportunidad para demostrar esto».
Ronaldinho espera repetir la magnífica actuación que firmó el año pasado en el Bernabéu, cuando consiguió dos tantos y acabó aclamado por parte de los aficionados madridista. «Espero repetir, es lógico. Nos respetan mucho y nosotros también a ellos. Vamos a ir a hacer nuestro fútbol, intentaremos llevarnos los tres puntos. No es que jugar en el Bernabeu me motive especialmente, pero es el clásico, el partido más esperado. No es nada especial jugar allí, sino jugar en este gran partido», opinó.
Ronaldinho considera que el equipo y él mismo necesitan ser respetados después de lo conseguido en el pasado.
«Todos los años pasa lo mismo. Cuando el equipo no está bien o no ganamos, la gente empieza a preguntarse cosas».
