Apareció el mejor Barcelona de la temporada para ofrecer una exhibición (94-67) frente a uno de los equipos de moda del campeonato, el Akasvayu Girona, un conjunto plagado de ex barcelonistas, que no conocía la derrota y era uno de los líderes de la ACB. En un cuarto final espléndido, se vio el baloncesto que había caracterizado hasta la fecha a los equipos de Dusko Ivanovic, pero del que apenas había noticias en el Palau. Equilibrio entre el juego interior y el exterior, continuas canastas en transiciones en un ritmo trepidante, gran acierto desde fuera, pero sobre todo máxima intensidad.
El Akasvayu Girona aguantó hasta el inicio del cuarto final (66-59), pero no pudo hacer más. Svetislav Pesic, que volvía al Palau junto con otros ex barcelonistas (Marc Gasol, Gregor Fucka, Víctor Sada y el lesionado Bootsy ‘Thornton’) planeó bien el partido, pero no esperaba que el Barcelona despertara del letargo en el que andaba sumido. Batió el equipo de Ivanovic todos sus récords esta temporada. Consiguió la máxima diferencia a su favor (27 al final), el mayor número de asistencias (23 asistencias), el mayor número de puntos (94), pero sobre todo ofreció un baloncesto completo en todas las facetas del juego.
Fue Gianluca Basile (21 puntos con 6 triples) el que sustentó al equipo en los mejores momentos de los gerundenses, pero Juan Carlos Navarro estuvo espléndido (18 puntos, 8 asistencias y 31 de valoración), Fran Vázquez (17 puntos y 4 tapones) fue el intimidador que buscaba Ivanovic y De la Fuente (10 puntos y 10 rebotes) estuvo a un magnífico nivel.
El partido respondió a las expectativas mientras estuvo igualado. La buena defensa del Girona fue contrarrestada por el acierto en el tiro del Barcelona desde el principio. Marc Gasol empezó con mucho empuje y su equipo se fue con un mínimo 23-22 después de los primeros 10 minutos. En cuanto calentó la muñeca Basile, el Barcelona vivió de sus triples. Antes del descanso ya había anotado 4 para un total de 14 puntos.
