El Caja San Fernando confirmó el buen momento de forma por el que atraviesa, sumó su quinta victoria consecutiva y acabó con la racha de tres triunfos seguidos en su pista que acumulaba el Pamesa Valencia en la Fuente de San Luis, un escenario en el que, además, el equipo sevillano había perdido en sus últimas seis visitas. Con un notable porcentaje desde la línea de tres puntos, el equipo de Manel Comas contuvo las ganas iniciales del Pamesa y minó su débil moral.
Después, le bastó con una defensa correcta para borrar las ideas ofensivas locales, que ven cómo se complica y mucho su clasificación para la Copa del Rey y que durante los últimos minutos fueron silbados por sus aficionados, que pidieron también la dimisión de Víctor Sendra, director general de la entidad. Rubén Douglas fue el protagonista de los primeros segundos del choque. Inauguró el marcador del encuentro con un triple que puso fin a una pésima racha que le había mantenido tres partidos sin anotar desde la línea de 6’25, pese a que lo había intentado en veinte ocasiones. De hecho, los triples, hasta siete, se encestaron en este periodo y marcaron un primer cuarto igualado y presidido por un incesante baile de cambios que aumentó la viveza del juego pero que impidió que ninguno de los dos equipos asentara su juego.
El guión no se alteró en los primeros minutos del segundo cuarto. El Pamesa mantuvo la iniciativa en el marcador pero cada vez que el conjunto valenciano amenazaba con abrir una pequeña brecha en el tanteo, Filip Videnov respondía con triples, que dejaban en nada el esfuerzo defensivo local. De tres en tres, el conjunto sevillano minó la moral del Pamesa y le dio la vuelta al choque. Además del escolta búlgaro, otros cuatro discípulos de Manel Comas sumaron desde esa posición en este periodo y pusieron contra las cuerdas al equipo local, incapaz de frenar la maquinaria ofensiva del Caja, que se fue al descanso con una cómoda ventaja de ocho puntos.
