(EFE).- El Gran Canaria Grupo Dunas cayó derrotado en Sevilla ante uno de los equipos más en forma de la liga, el Caja San Fernando, que sumó su sexta victoria consecutiva, en un partido marcado por la extrema falta de acierto de los dos equipos en muchas fases del mismo.
Ya el comienzo resultó muy errático en ambos conjuntos. Mientras los canarios, tras el triple inaugural de Kornel David, coleccionaban errores desde la línea de 6,25 metros, los sevillanos aún no habían ajustado sus líneas de pase.
Una cesta en penetración de Norris permitió al conjunto insular retomar la cabeza del luminoso (6-7, m.4) y abrió el ciclo de sustituciones en el cuadro cajista, en tanto que el mate posterior de Vroman y la pérdida de balón de Alexander motivaron el primer tiempo muerto de Manel Comas (8-9, m.6).
Los andaluces tenían problemas para encontrar su juego. Norris cubría bien al base estadounidense Price, clave en las dos últimas victorias del Caja San Fernando, y sobre todo no existía aportación exterior, básica para los locales. Así, dos incursiones de Norris sellaron la máxima ventaja canaria de cinco puntos (8-13, m.9) y el primer cuarto concluyó con un indicado bajo tanteador (10-15).
Nada mejoró en la continuación del partido. La misma falta de acierto volvió a sacudir al Caja San Fernando, pero también el Gran Canaria -con los suplentes- se contagió de la ineficacia exterior de los anfitriones, lo que cortó su lento flujo de puntos pues en la zona Femerling «asustaba» a Savané y Baldo, improductivos.
Durante tres minutos nadie logró anotar (hasta que Longin apuntó el primer triple local) y el encuentro ingresó en una fase de descontrol en ambos conjuntos en la que sobraron las ganas y faltó la puntería.
Vroman, en un singular contraataque con otros dos compañeros, deshizo el empate a 19 puntos (m.17) dos minutos después de haberse producido éste y ya nadie logró mover el marcador hasta el minuto final de este cuarto cuando Bueno restableció la igualada (21-21).
Este festival de despropósitos arrojó al descanso una estadística impropia de equipos situados en posiciones coperas. Baste decir que de los veinte intervinientes sólo nueve anotaron, que se intentaron veintitrés triples por sólo dos anotados y que el promedio de acierto en tiros de dos de los canarios fue del 32 por ciento.
