(PD).- Pese a disfrutar de una envidiable situación deportiva, en el Real Madrid están los ánimos muy caldeados. Y si no, que se lo pregunten a Michel Salgado y Mahamadou Diarra que han protagonizado un poco saludable pique durante el entrenamiento en la Ciudad Deportiva de Valdebebas y que a punto estuvo de acabar en pelea. Incluso el francés le retó a seguir la discusión en el vestuario. Muy nerviosos, y sin explicación se pensarán los seguidores.
De lo que se ha tratado de comprender fue la razón del inicio del enfrentamiento. El malí recriminó algo al gallego, que no le hizo mucho caso, pero el centrocampista le buscó en varias ocasiones, recibiendo algún empujó del lateral para tratar de terminar con el asunto. Sin embargo, el malí no parecía satisfecho con la reacción de su compañero y le retó a resolver sus problemas en el vestuario. Salgado ‘pasó’ del enfado de su compañero, aunque llegó a tirar una botella de agua para mostrar su enfado con la insistente actitud del francés.
De lo que no ‘pasó’ es de hablar de su presidente. Salgado, que pidió tranquilidad a los madridistas que acudan el próximo domingo a la Asamblea del club, solicitó que le dejen «trabajar tranquilo» al presidente Ramón Calderón, aprovechando la ocasión para recordar que fue elegido en las elecciones el pasado verano.
«Los jugadores no sentimos indiferencia ante lo que puede pasar, somos parte importante del club y todo lo que suceda en el Real Madrid nos interesa. Lo que les ocurra a nuestros jefes, a los que mandan en el club, nos importa. Queremos tranquilidad de una vez. Que se empiece a trabajar con calma y claridad desde arriba».
Para Míchel Salgado las situaciones que ha vivido el Real Madrid en las últimas temporadas, con cambios en todos los estamentos del club, han terminado perjudicando en lo deportivo para colaborar en los tres años sin títulos.
«Desde luego que la inestabilidad ha afectado. Tantos cambios de entrenadores, elecciones, no eran buenos. Ahora ha habido unas elecciones, los socios han elegido un presidente, han trabajado en crear un equipo y estamos en una temporada de acoplamiento tras pasar demasiadas cosas en el pasado. No es fácil romper con eso estamos en una fase de adaptación».
En pleno ambiente turbulento ha aparecido José Antonio Camacho, ex técnico del Real Madrid y de la selección española, que se mostró «convencido» de que el presidente del club blando «será otro cuando se abra el voto por correo» aún pendiente de las elecciones del pasado mes de julio.
El murciano, que entró en la candidatura de Juan Palacios como director deportivo, señaló sobre el proceso judicial en curso:
«Estoy tranquilo, pero también decepcionado porque el tema se tenía que haber solucionado ya. Creo que cuando se abra el voto por correo el ganador de las elecciones será otro».
Y, hablando del rey de Roma, Calderón también quiso aprovechar la jornada para reiterar que
no le preocupa en absoluto la Asamblea del próximo domingo, al tiempo que aseguró que «no hay prisa» por cerrar el fichaje de Gago, pero que espera que pueda estar en el equipo después del parón navideño.¿Una solución a corto plazo?
«Es algo que va a ocurrir, pronto, pero es una cuestión que nada tiene que ver con la Asamblea. No hay prisa. Hasta el día 7 de enero, que jugará en A Coruña, espero, si el entrenador lo considera oportuno, hay tiempo».
Sobre la Asamblea, recalcó que siempre ha sido una «reunión de amigos» unidos por el vínculo de ser madridista.
«Lo que pasa es que a muchos presidentes, como no conocían la Asamblea, les daba miedo, pero yo llevo 20 años yendo y me encanta ir, que la gente sea crítica, opine, sugiera, que diga lo que le dice un amigo a otro de lo que le gusta y de lo que no».
A Calderón se le ha cuestionado sus promesas incumplidas, pero el máximo dirigente del club blanco está convencido de que Gago vestirá la zamarra blanca, incluso en enero. Pero, ¿qué tiene que decir el jugador al respecto? Su representante, Marcelo Lombilla, aseguró en la prensa argentina que «no se le puede decir que no al Real Madrid si quiere ficharlo ahora» y que el presidente del Boca Juniors, Mauricio Macri, «debería entender eso». Lo que sí es premonotorio los medios locales están convencidos de que la salida del jugador es inminente.
Macri ha declarado en los últimos días que Gago continuará en el equipo argentino hasta mediados de 2007, pese al interés del club blanco, y que Boca, aseguró, «no tiene apuro» en traspasarlo.
«Ésta es una posibilidad imposible de rechazar», dijo Lombilla al diario argentino deportivo ‘Olé’ horas después de haberse reunido en Madrid con el director de fútbol de Real Madrid, Pedja Mijatovic.
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