(PD/EP).- El capitán del Real Madrid, Raúl González Blanco, reconoció la «decepción» por la eliminación europea, pero quiso comenzar a pensar en ganar el sábado el clásico, para poder «meterse en la pelea por la Liga», ya que de lo contrario llegaría la cuarta temporada sin títulos.
«Con el gol, a ellos se les puso el partido como más les favorece, pero son cosas que suceden, y, aún así, el equipo reaccionó y durante muchos minutos manejamos el partido y tuvimos ocasiones de pasar la eliminatoria».
Por eso, no cree que aún se pueda hablar de otro año sin títulos.
«De momento puede ser que vayamos por ese camino, pero aún no lo es y las valoraciones hay que hacerlas al final. Está siendo una temporada muy irregular y no hemos encadenado el ritmo adecuado. Ahora estamos en una fase difícil, porque el sábado si no ganamos nos alejaría mucho de la consecución del título, pero si lo sacamos, quedan muchas jornadas por delante, sólo con esa competición, y creo que estamos capacitados».
El capitán sabe que un nuevo año en blanco traería cambios, y que «los que están al mando del club deberían tomar las decisiones que crean oportuno», pero lamenta que esta temporada también ha habido «cambios, pero no han venido los objetivos».
«Siempre pueden venir jugadores que enriquezcan la plantilla y otros que se marcharán, es la ley del fútbol y a todos nos puede tocar».
Sin embargo, asegura que la «limpieza» de la que se habla en los medios a ellos no les «llega» del club.
«Nos llega la confianza en ganar partidos, pero siempre habrá altas y bajas porque en todas las temporadas pasa».
«ESTA TEMPORADA HAN PASADO COSAS EXTRAÑAS».
Así, reconoce que «esta temporada han pasado cosas un poco extrañas y diferentes», pero reitera que para eso «están los máximos responsables y es mejor hacer las valoraciones al final, aunque en un club como este a veces hay que tomar decisiones sobre la marcha»
El capitán no quiso restar responsabilidad de los jugadores, aunque Capello sea el máximo responsable de la alineación. «Estamos todos en el mismo barco, estamos todos eliminados y decepcionados, pero ya trabajando porque el sábado hay un partido muy importante y podemos meternos en la pelea por la Liga y dar una alegría a los aficionados», apuntó.
«Los jugadores tenemos nuestra responsabilidad, pero está claro que la situación de los últimos años no es fácil y hay cosas que no se han hecho bien, todos somos culpables y nosotros debemos ver que nuestro rendimiento tampoco ha sido bueno».
Tampoco dio importancia a que se habla de un fin de ciclo:
«No sé cuando empiezan o acaban los ciclos, no sé en qué ciclo estamos ahora mismo. Intentamos hacer las cosas bien, ganar títulos, pero los resultados no se han dado, aunque vamos a seguir peleando para que pronto quieran llegar».
Igualmente, pese a la insistencia de la prensa eludió meterse con las decisiones de Capello, sobre si Guti debería haber salido antes o en la situación de Emerson.
«No soy el entrenador. Él saca a los que cree conveniente y aquí estamos todos para ayudar a sacar esto adelante. Hay gente que toma las decisiones que cree oportuna y nosotros sólo podemos entrenar y queremos ganar».
«El entrenador cada vez que hace un once piensa que va a ser bueno para el equipo, pero a los 10 segundos se nos puso todo en contra. En cuanto salió Guti fue otro partido, el equipo se empezó a sentir mucho más cómodo, pero así son las circunstancias», añadió.
De cara a la Liga asegura que por su cabeza «sólo pasa ser campeón» y por eso «no firma» ser cuarto y asegurarse la ‘Champions’.
«Pienso en el título, sabiendo de las dificultades y de que por delante hay equipos muy fuertes, pero nos tenemos que enfrentar a los tres y de ahí van a depender las opciones».
Comenzando por el clásico, al que los dos llegan después de la decepción europea, y con los azulgranas como más favoritos «por jugar en casa». «Intentaremos que sea de tú a tú, que no nos dominen y tener la pelota como creo que ayer tuvimos en muchas más fases», dijo.
Personalmente, sigue sin jugar en su puesto, pero tampoco se queja de su situación.
«El entrenador y todo el mundo sabe donde rindo más, pero por las circunstancias del equipo estoy jugando en posiciones diferentes, pero siempre con la intención de llegar al área, aunque un poco más alejado».
