(PD/Agencia EFE).- El Bidasoa ha perdido buena parte de las esperanzas que tenía para mantenerse en la División de Honor, tras caer derrotado en su cancha ante el Torrevieja, que ha sido mejor equipo sobre el parqué de Artaleku.
El Torrevieja explotó al máximo sus virtudes en el periodo inicial. El 6-0 de su defensa fue suficiente para frenar los ataques locales. Lesionado Stankovic, la primera línea perdió buena parte de sus argumentos ofensivos, pasando del 6-6 (15′), al 10-15 con el que concluyó la primera mitad.
Los contraataques alicantinos fueron decisivos, así como los lanzamientos de Mrvaljevic para los que no tuvo respuesta la profunda defensa irundarra.
Planteadas las claves del partido, el devenir de los acontecimientos ofreció la imagen de dos equipos bien distintos. El Torrevieja, tranquilo y con sus deberes hechos, marcó los tiempos de juego, a través de ataques largos, rozando la pasividad, que obligaron a los defensores locales a un esfuerzo físico enorme.
Pagó factura a través de las exclusiones. Las superioridades correspondientes las supo jugar bien el equipo de Manuel Laguna. Así las cosas, los visitantes administraron su ventaja sin sobresaltos.
El segundo tiempo amplió la ventaja hasta un contundente 16-21, que parecía definitivo. Los locales, pese a tenerlo todo cuesta arriba, echaron el resto y apretaron los guarismos hasta un 20-22, que devolvía la ilusión a los espectadores.
A partir de ahí, los dos equipos intercambiaron goles, sin que el Bidasoa pudiera acercarse más. Se lo impidió el acierto del zurdo Vukas, que en este periodo marcó siete de sus nueve tantos.
Los últimos minutos fueron la imagen de la impotencia en el equipo irundarra. Pese a que su técnico Julián Ruiz solicitó un tiempo muerto tratando de conseguir la última reacción, cambiando la defensa, presionando en todo el terreno sobre el oponente, éste supo buscar sus momentos y asegurar el resultado con remates de Cuartero y Andersson.
El Bidasoa, pese a que se mantuvo entero, gracias a los goles de Aagaard, terminó cediendo y diciendo casi adiós a la categoría.
