(PD).- Un gol de Jonatas en la segunda parte de la prórroga devolvió la esperanza al Espanyol que milagrosamente empató una lucha sin tregua frente al Sevilla en la final de la Copa de la UEFA. La lotería de los penalties dio el triunfo final al conjunto de Juande. Palop se convirtió en el hombre decisivo de la victoria gracias a sus tres paradas en la tanda decisiva.
Desde los once metros, Palop, clave ya en la fase de clasificación con su gol de cabeza en Ucrania, se convirtió en el protagonista, deteniendo los lanzamientos de Luis García, Jonatas y Torrejón, para que el Sevilla se impusiera por un global de 3-5.
El Espanyol había logrado alcanzar la tanda de penaltis después de que Jonatas firmara el empate en el minuto 115 con un fuerte disparo desde la frontal cuando el Sevilla, que jugó con uno menos desde el minuto 67, parecía que se iba a apuntar el partido gracias a un tanto de Kanouté en el último minuto de la primera parte de la prórroga. Adriano había adelantado al Sevilla en el minuto 18 y Riera había hecho el empate diez minutos después.
El conjunto de Nervión emula así al Real Madrid, único equipo que había conquistado dos UEFAS consecutivas (1985 y 86), y se adjudica su segundo título de la temporada después del alcanzado el pasado mes de agosto ante el FC Barcelona en la Supercopa de Europa.
Kanouté, en la primera parte de la prórroga, adelantó al Sevilla frente a un Espanyol que, con la falta de un hombre desde el minuto 67 tras la expulsión de Moisés, no dejó de pelear hasta el final, aunque intentó alcanzar la ronda de penaltis. Lo que parecía inevitable se disipó con el gol de los ‘periquitos’.
Lucha sin tregua la que se vivió en Hampden Park. A pesar de todo, el Espanyol, que trató de ir a la contra, a la desesperada y a ofensiva cuando los minutos avanzaban rapidamente y, después de llegar hasta la tanda de penalties, la fortuna no continuó de su parte.
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