(EP).- El ala pívot español Pau Gasol desea afrontar su séptima temporada en la NBA con una franquicia ganadora y está dispuesto a permanecer en las filas de los Grizzlies, a pesar de que este año han sido el farolillo rojo de la tabla, siempre que el club de Memphis sea capaz de poner en marcha un proyecto ilusionante.
«Depende del aire que se respire, del esfuerzo que haga la franquicia para tener un equipo competitivo, de si hay un proyecto ganador… Si es así, la ilusión volverá, porque a mí lo que me interesa es ganar. Si me pitan y ganamos, me da igual. Repito: si el proyecto me ilusiona, no me importaría volver a Memphis y darlo todo», explicó Gasol en declaraciones a la Revista DT.
Gasol, que apenas puede hacer alguna lectura positiva de la temporada pasada a pesar de haber logrado sus mejores estadísticas personales en la NBA (20,8 puntos y 9,8 rebotes por partido), reconoce que nunca viviría lo que ha pasado «si pudiera volver en el tiempo», que ésta ha sido una temporada tormentosa para él y que necesitaba unas vacaciones «más que nunca».
«La temporada ha sido muy larga y muy dura y no ha sido muy agradable. Ansiaba tener unos días alejado del baloncesto y de toda la negatividad que nos ha rodeado este año. Tenía ganas de oxigenarme», admite Pau, cuyo equipo acaba de fichar como nuevo mánager general a Chris Wallace y como entrenador a Marc Iavaroni -ex segundo de los Suns de Phoenix-.
En cuanto al próximo español que ve en la NBA, Pau destaca a tres máximos candidatos: Rudy Fernández, Juan Carlos Navarro y su hermano, Marc Gasol.
«Los tres están ahí y cualquiera de ellos puede jugar en Estados Unidos. A ver cuál de ellos se atreve primero»
También lo tiene muy claro a la hora de dar un nombre, el del jugador que más le ha impresionado a lo largo de esta temporada: Kobe Bryant, la estrella de Los Angeles Lakers. «Se ha hartado de meter puntos. Hubo unos 10 ó 15 partidos que jugó con una confianza tremenda, en los que metía todo, más de 40 puntos por partido. Eso es dificilísimo», añade el internacional español, que cree que en un futuro «la NBA abrirá sus puertas y habrá franquicias en Europa y Asia. Los norteamericanos saben mucho de sacarle rendimiento a un producto, y a esto le van a sacar mucho beneficio», destaca.
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