(PD/Agencias).- La Unión Ciclista Internacional (UCI) solicitó al corredor Alejandro Valverde que justifique una ausencia en su domicilio cuando los médicos de este organismo acudieron a realizar un control antidopaje por sorpresa el pasado 23 de junio.
El máximo organismo del ciclismo mundial ofreció a Valverde la posibilidad de presentar alegaciones en el plazo de 10 días bajo riesgo de amonestación.
Valverde ha recibido un documento de la UCI en el que le comunica que el pasado 23 de junio un inspector de dicho organismo no le encontró en su casa para someterle a un control antidopaje. Según comentó el representante del corredor, Francisco Sánchez Sabater, Valverde envió a la UCI en marzo su planificación de carreras. Posteriormente, con fecha 12 de junio, el ciclista del Caisse D’Epargne comunicó por fax un cambio en su plan de competición, para acudir a una competición que tenía lugar en Eindhoven (Holanda) entre los días 23 y 25.
«Además, en la citada carrera, se dio la circunstancia de que Alejandro Valverde pasó control antidopaje. Ellos sabían, porque lo había comunicado, que Valverde no estaría en casa el 23 de junio», explicó Valverde.
Por su parte, la Federación española (RFEC), mediante su secretario, Eugenio Bermúdez, salió al paso en defensa del doble subcampeón mundial y se mostró crítico con la UCI. «Me parece bochornoso y deleznable que la UCI le pida a Valverde que presente sus alegaciones y le amenace con una amonestación.
Ahora le piden que justifique su ausencia, de lo contrario le advertirá por eludir el control. Puede demostrar su ausencia con los billetes del viaje. Además, en la carrera que compitió pasó control. La UCI ha filtrado una información que no se ajusta a la realidad», concluyó Bermúdez.
