(PD / EFE).- Elogios para un rival superior, críticas al mal partido del equipo local y peticiones de dimisión para el seleccionador Morten Olsen: ese es el resumen de lo que hoy escribe la prensa danesa sobre el encuentro de anoche en Aarhus.
Los más duros son los tabloides, como Ekstra Bladet, que titula en portada «Morten, vete» y encabeza su crónica con un elocuente «Adiós», en español; y BT, que pregunta por el precio de la cláusula de rescisión del noruego Staale Solbakken, técnico del Copenhague, dominador de la liga en los últimos años. Ekstra Bladet señala que España le pasó por encima a Dinamarca en la primera parte y destaca, como la mayoría de diarios, la labor de 3 hombres: Joaquín, Cesc -«hizo lo que le dio la gana»- e Iniesta, y el cronista, de paso, se pregunta sobre su supencia en otros partidos.
El centrocampista del Barcelona, un «artista», fue el hombre que marcó la diferencia, según BT, junto con el «señor pegamento» Xavi, por su habilidad para llevar el balón cosido al pie, y Joaquín, al que «sólo le faltó el traje de luces para rematar la faena» frente a su marcador, Niclas Jensen. Los dos laterales daneses acaparan buena parte de las críticas por su lentitud, lo que hace que algunos diarios reclamen un cambio generacional, que incluye al técnico.
A Olsen se le reconocen sus méritos en sus 7 años al frente del equipo y su apuesta por un fútbol atractivo, pero se le recuerda que ha fracasado en la clasificación para dos fases finales seguidas, aunque ningún medio cree que vaya a ser destituido, sino que, al contrario, cumplirá su contrato hasta 2010.
El periódico Jyllands Posten apela a que ya sólo sirve un milagro para que Dinamarca acceda a la Eurocopa, tras una derrota en que el equipo, pese a tener ocasiones, se mostró pasivo e impotente frente a un rival, que esta vez ganó sin que haya que recurrir al tópico de la leyenda negra. «España alineó a 5 centrocampistas sublimes en el manejo del balón: fue una decisión genial del tan criticado Aragonés. Acumulaba 10 jugadores por detrás del balón cuando Dinamarca atacaba, pero cuando recuperaba tenía muchos metros por delante y superioridad numérica», escribe este diario, el más elogioso con el técnico español, al que toda la prensa reconoce su maestría.
Politiken incide en la efectividad de España, que tuvo el balón en su poder frente a un rival al que le faltó la agresividad de la que tanto había hablado antes del partido para poder robar la pelota. El único diario que alude al maleficio español es Berlingske
Tidende, que critica la confusión en el centro del campo en la primera parte y «se quita el sombrero» ante el juego de toque del equipo de Aragonés, cuya muestra más acabada fue el gol de Ramos.
