(PD).- La esquizofrenia del equipo McLaren durante esta temporada ha llevado a protagonizar un rídiculo final del campeonato mundial de Fórmula 1 y que ha propiciado que Ferrari resulte vencedor tanto en constructores como en pilotos. Kimmi Raikkonen es el nuevo campeón del mundo.
En la vuelta uno, Alonso adelantó a Hamilton. El británico se salió de la pista. Massa se puso primero, por delante de Raikkonen y Fernando tercero.
La esperanza de Alonso de lograr su tercer título mundial se podía cumplir. Entran en juego a partir de ahora las matemáticas.
Durante un tiempo a McLaren le salían las cuentas y Alonso se proclamaría campeón, pero sólo si el Ferrari de Massa entraba por meta por delante de su compañero Raikkonen. Pero eso era algo que el equipo no iba a permitir.
En cuanto las posibilidades de ponerse segundo de Alonso se fueron distanciando, el título cada vez quedaba más lejos.
Una carrera sin apenas emoción y con una única conclusión clara: ridículo de los directivos de McLaren que por no apoyar a su primer piloto (Alonso) en detrimento del novato Hamilton les ha llevado a peder ante Ferrari tanto el título de pilotos como el de constructores.
LA PRENSA BRITÁNICA LE DA DURO A HAMILTON
Ha sido su niño bonito durante meses, pero ahora le dan duro. Con esa habilidad cruel para el títular que caracteriza a los tabloides, los reporteros de The Sun escriben:
«LEW-SER … Lewis Hamilton’s World title dream ends in Brazil»
Juegan con el nombre de Hamilton y con la palabra «loser» para componer algo parecido a «PERDEDOR«.
A quien no le dan tregua es a Dennis, el jeque de Mclaren, a quien pone de bobo para arriba.