David Ramírez (Periodista Digital)-. Kimi Raikkonen se ha proclamado por vez primera campeón del mundo de Formula 1. El finlandés, piloto como más victorias de esta temporada, ha sabido aprovechar la turbulenta situación del equipo Mclaren y sus pilotos.
Ferrari, rey de la estrategia, sabía muy bien que la situación se presentaba muy fea para poder coronarse en el mundial de pilotos, pues al igual que Alonso, dependía de factores ajenos a su alcance.
Aún así, jugaron bien sus cartas, y cuando el semáforo se puso en verde esta tarde sobre el circuito de Brasil, pudimos contemplar una emocionante primera vuelta, en la cual Hamilton partiendo desde la segunda posición, se vio adelantado primero por Raikkonen y posteriormente por Alonso en una calculada maniobra en la primera y difícil curva del trazado. Todos los coches se dirigían a la siguiente variante, cuando el inglés echo por la borda todas sus opciones para alzarse con un campeonato que tenía en bandeja.
Hamilton en una maniobra suicida y podido por la presión de verse adelantado por sus rivales en la lucha del mundial, se pasó de frenada en la curva tres, donde casi se lleva por delante a su compañero Alonso, y saliéndose fuera de la pista sobre una superficie sin puzolana, lo que sumado al posterior bloqueo de su caja de cambios, le supuso reconstruir una carrera en la que se dedicó a remontar posiciones desde atrás, aunque sin demasiado esfuerzo, terminando la carrera en séptima posición.
De esta manera suma un preciado punto, gracias al cual ha conseguido situarse segundo en la clasificación final de este apretadísimo mundial, empatando con Alonso a 109 puntos.
Por su parte, Fernando cruzaba los dedos esperando un fallo de los coches rojos, pues todavía tenía opciones de proclamarse tricampeón mundial. El español luchó en tierra de nadie terminando 3º e intentando seguir con un coche notablemente más lento a unos Ferrari inalcanzables que intercambiaron sus posiciones estratégicamente como era de prever para alzarse con el mundial de pilotos a favor de Raikkonen.
Ridículo por tanto para Mclaren y Hamilton, en una parte final de la temporada donde Ferrari le ha robado la cartera a un Ron Dennis que no ha sabido dirigir de la manera más correcta su equipo, y en la que el rápido piloto inglés, aun teniéndolas todas a su favor, no ha sabido defender fríamente su mundial.
LA GASOLINA «CONGELADA» COMO ÚLTIMA BAZA
La última jugada de Dennis, tratando de ganar para su pupilo el título, también salió mal. La Federación Internacional de Automovilismo (FIA) ha dejado sin sanción a los tres coches (dos BMW Sauber y un Williams) que quedaron por delante de Lewis Hamilton en el GP de Brasil, por lo que el británico de McLaren no suma más puntos y Kimi Raikkonen conserva su título mundial.
El motivo de la investigación se centró en la temperatura del combustible de los cuatro coches tras la carrera, que estaría por debajo del límite de 10 grados por debajo de la temperatura ambiente. Presuntamente, esta gasolina alcanzó 15 grados menos.
Sin embargo, los comisarios desestimaron la descalificación o cualquier otro tipo de castigo para estos tres pilotos, el alemán Nico Rosberg (Williams-Toyota) cuarto, en la meta y los dos pilotos de BMW Sauber, el polaco Robert Kubica y el también germano Nick Heidfeld, quinto y sexto tras la bandera a cuadros.
