(PD / EFE).- El mexicano Rafael Márquez, defensa del Barcelona, reconoció hoy que quizás no sea un atleta fuerte y que quizá ésa es la causa de tantas lesiones cada temporada. «Quizás mi anatomía no soporta tanto ritmo; he tenido muchas lesiones desde que estaba en el Mónaco de la liga francesa y sólo me queda aprovechar cuando estoy bien para mostrar mi nivel», dijo el azulgrana, en una conferencia de prensa en la Ciudad de México.
Después de afeitarse ante casi un centenar de periodistas, como parte de la campaña publicitaria de uno de sus patrocinadores, Márquez aseguró estar de regreso tras una dolencia y listo para reaparecer con su equipo cuando se reanude la temporada española, el último fin de semana de este mes.
Vestido de negro y el pelo recogido, el jugador dijo entender a los medios de España que lo han criticado por hacer un viaje a México recién salido de una lesión y dijo que los periódicos necesitan asuntos para escribir ahora que no hay nadie en Barcelona porque las figuras se fueron a jugar con sus respectivas selecciones. «No me queda más que hablar en la cancha como siempre», aseveró.
Al referirse a su equipo, dijo que sólo los jugadores pueden hablar de lo que pasa dentro de él y ellos apoyan al técnico Frank Rijkaard. «Estamos listos para ser competitivos en la liga y en las Copas Internacionales», comentó.
Un día antes de que el técnico de la selección mexicana Hugo Sánchez cumpla un año en su puesto, Márquez dijo estar cómodo como capitán del equipo y orgulloso por el hecho de que el entrenador, antiguo goleador del fútbol español, lo tenga en sus planes para los próximos juegos Olímpicos. «Es la única competencia que no he jugado, es un orgullo que Hugo me tome en cuenta», señaló.
Fragancia española en México
Márquez, jugador del FC Barcelona, reunió a dos centenares de aficionados en un sesión de autógrafos y promoción de su fragancia, de una marca española, celebrada hoy en la capital de su país.
Márquez, quien llegó a México la noche del lunes en visita de promoción comercial, estuvo durante casi 60 minutos a las puertas de un centro comercial situado al norte de la capital mexicana para firmar fotografías suyas.
Clientes que adquirieron su fragancia, de la casa barcelonesa Puig, y aficionados que compraron camisetas y balones del Barcelona, recibieron los autógrafos y se tomaron fotografías con el defensor mexicano.
El jugador del Barcelona tomó el micrófono al final de la sesión y agradeció «a todos que hayan venido aquí, que hayan comprado el producto y gracias por el apoyo».
Tiene previsto ofrecer una rueda de prensa en la capital mexicana auspiciada por una empresa trasnacional como parte de su visita comercial a México.
