(David Ramírez/PD).- Este fin de semana los motores volverán a rugir sobre el desierto de Sakhir; el Gran Premio de Bahrein acogerá la tercera prueba de la temporada. En su particular viaje por las antípodas, la F1 se acerca hasta Oriente Medio para posteriormente regresar a España.
Bahrein no mostrará demasiadas sorpresas en lo deportivo; los equipos deberán seguir demostrando pero sin contar con grandes evoluciones a nivel técnico. Hasta el regreso a Europa, no tendrán tiempo para desarrollar los vehículos.
Este es el caso de Alonso, que contará con el mismo pobre nivel de competitividad en su coche.
«Nuestro coche está todavía en fase de desarrollo y estoy seguro de que ya se verá un gran paso en Barcelona, apunta Flavio Briatore.
Será por tanto una carrera dura para el piloto español, necesitado de golpes de efecto en la carrera para remontar puestos. «Da rabia tener como objetivo puntuar entre el sexto y el décimo puesto, asegura Alonso.
Se trata de un circuito ajeno a la lluvia, donde el calor hace acto de presencia; que permite errores y no es propicio a abandonos por salidas de pista ni accidentes; será difícil por tanto ver al safety car, y adelantar no propiciará excesivos problemas para los coches potentes.
Bahrein es un trazado de potencia, con largas rectas y frenadas fuertes. El reciente circuito posee unas instalaciones de primer nivel y muy seguras, tiene como particulariedad que todas las escapatorias fuera de la trazada son de asfalto, por lo que será fácil para los pilotos volver a la pista sin consecuencias en caso de salida de pista.
De La Rosa comenta que «tiene hasta tres puntos de adelantamiento muy buenos que son la frenada de la curva uno, la cuarta y la de entrada a meta, que tienen frenadas muy fuertes y largas a las que se llega a más de 310 kilómetros».
El seco calor, la resbaladiza arena, así como el viento que inestabiliza a los monoplazas en las frenadas, serán inconvenientes a la hora de pilotar.
Se deberán escojer las gomas de forma concienzuda, deacuerdo a las altas temperaturas. La carga aerodinámica será bastante reducida para favorecer la velocidad punta en las abundantes rectas, lo que conseguirá que los vehículos pierdan apoyo en las frenadas y curvas más lentas.
EN EL PLANO DEPORTIVO
Veremos un Ferrari ansionso por conseguir el doblete, lo cual será fácil si la fiabilidad no vuelve a ponerse en entredicho y Massa no hace de las suyas como en Malasia.
McLaren deberá ponérselo difícil a Ferrari y no dejarse achantar por BMW-Suber, un BMW que tendrá la obligación de demostrar que sigue estando en el grupo de cabeza ¿Nos sorprenderán con otro podio?
Por su parte Renault seguirá contando con la destreza de Alonso, mientras Piquet sigue aprendiendo, para intentar salvar la caótica situación del equipo. Un patético Renault que no puede con Toro Rosso y Toyota.
Abróchate el cinturón y comienza la carrera:
