Txema Glaría, un navarro en tierra de vikingos

Txema Glaría, un navarro en tierra de vikingos

José Rosado (PD).- Averoy, a las afueras de Molde. Un grupo de chavales corren de un lado para otro en un campo embarrado; en medio, un hombre grita a los delanteros para que bajen a defender. Habla noruego con un acento extraño y su facciones no corresponden con el típico escandinavo. Se llama Txema Glaría, es navarro y abandonó España hace más de quince años para jugar en Noruega. Tanto le gustó la experiencia que decidió quedarse.

Txema Avizanda Glaría, conocido futbolísticamente en Noruega como el ‘Flaco’, debutó como profesional en 1986 en el Rayo Vallecano. Tras algunos problemas con los directivos y siguiendo el consejo de su amigo y compañero en el club, Jan Berg, Glaría decidió en 1992 dejar el equipo madrileño y hacer las maletas con destino a Molde.

Fuimos allí de vacaciones un par de veces y me gustó. Cuando acababa contrato con el Rayo me hicieron una oferta para jugar un año. Una vez allí conoces otra cultura y otra forma de entender las cosas, irse para un año y estar 16…

Allí jugaría unos años más hasta que, en 1996, una grave lesión le obligó a colgas las botas. Decidido a seguir en el mundo del fútbol, Txema comenzó a entrenar equipos juveniles para coger experiencia. Ahora acaba de sacarse el carnet europeo de entrenador y es el técnico del Averoy, un equipo de la regional noruega

Con Glaría hemos visitado las instalaciones del Rayo Vallecano («qué tiempos») donde nos ha contado su salto a Noruega. Entiende que ha ocurrido en los últimos años «una explosión de gente española en toda Europa. «Hace unos años era impensable, ahora el fútbol se ha globalizado totalmente» señala el ex jugador del Rayo que considera este ‘éxodo’ de técnicos nacionales positivo ya que «todo lo que sea adquirir cultura futbolística te enriquece como entrenador».

Los entrenadores españoles han demostrado su calidad. No es fácil irse a Inglaterra como Benítez y hacer lo que está haciendo con el Liverpool, que no es un equipo comparable a Chelsea o Manchester. O Juande Ramos en el Tottenham que está haciendo un papel impresionante; cambiar de una cultura, habituarte rápidamente y conseguir resultados a corto plazo es complicado. Lo que pasa es que fuera se respeta mucho más la figura del entrenador.

Para Glaría no faltan proyectos de futuro en España, simplemente «no se lleva» la figura del manager al modelo británico. «Mientras que el manager tiene el poder absoluto, la figura del entrenador, en España, está supeditada a los resultados y, sobre todo, a la dirección deportiva».

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