(PD).- Suecia logró una trabajada victoria ante Grecia (0-2) en su debut en la Eurocopa gracias a la providencial intervención de su estrella Zlatan Ibrahimovic, que abrió el marcador mediada la segunda mitad descomponiendo a los vigentes campeones del torneo, muy compactos hasta ese momento.
Los nórdicos cosecharon sus tres primeros puntos en un partido muy igualado que desniveló la calidad del jugador del Inter de Milán y sentenció Hansson en una jugada embarullada en el área pocos minutos después. Suecia infrigió el justo castigo a una Grecia muy rácana que apenas atacó y se protegió en su buena defensa.
Si bien es cierto que en los primeros 45 minutos ninguno de los equipos mereció irse al descanso con victoria parcial, fue Suecia la que más méritos hizo, sobre todo al comienzo del partido, con varias llegadas de peligro. Los griegos, muy retrasados, se limitaron a tocar en su campo esperando a su rival, que tampoco se atrevía a atacar por miedo al posible contragolpe heleno.
Los de Lars Lagerback dominaron el encuentro, pero sus escasas llegadas se enredaron en la ferrea defensa griega hasta que apareció el hombre de mayor calidad del partido, Ibrahimovic. El delantero interista combinó bien con Larsson antes de lanzar un derechazo que Nikopolidis sólo pudo rozar antes de colarse por la escuadra.
Grecia se encontró con una circunstancia inesperada y no supo responder a la ventaja sueca, que tuvo continuidad cinco minutos después con un gol muy extraño que Hansson introdujo casi involuntariamente en la portería rival aprovechando un barullo en el área pequeña.
De esta forma, Suecia suma tres puntos que le sirven para colocarse como co-líder del Grupo D con España, que hoy goleó 4-1 a Rusia. Sin embargo, no todo fueron buenas noticias en el combinado nórdico, que vieron como caía lesionado el jugador del Deportivo Wilhelmsson.
