(PD).- «Va a haber sorpresas, y muy buenas, en los fichajes». Cerezo hacía templar los debilitados ánimos de los atléticos con estas palabras. ¿Otro Kleber Santana o Fabiano Eller? No; con la clasifiación para la Champions, la dirección del Atlético de Madrid quiere centrarse en un jugador de prestigio y elegido es el mediapunta del Werder Bremen, Diego Ribas.
El Atlético quiere acabar con el estigma de los fichajes y reforzar el equipo de cara a la próxima temporada que disputará la Champions. Tras los fichajes de los internacionales Heitinga y Ujfalusi, la dirección deportiva necesita cubrir el centro del campo con un mediocentro defensivo y un mediapunta de garantías.
Todavía negocia por Paulo Assunçao, del Oporto, pero necesita urgentemente cerrar el traspaso de un centrocampista ofensivo. Según cuenta As, Diego Ribas es el mejor colocado.
Ya preguntó el Real Madrid la pasada temporada por él, pero la elevada cláusula impidió su contratación. Ahora, los dirigentes del equipo alemán podrían rebajar sus pretensiones tasando el traspaso en 20 millones, una cifra razonable para las maltrechas arcas del Atlético.
‘Lucho’ González y Baptista
En cartera siguen jugadores como ‘Lucho’ González y Baptista. El jugador del Oporto lleva mucho en la cartera del Atlético pero el presidente del club portugués es un experto en ‘inflar’ el precio de sus traspasos. Además, el equipo acaba de ser readmitido para jugar la Champions y Nuno Pinto da Costa prefiere hacer un equipo competitivo.
El caso de Baptista, no obstante, resulta más viable. El jugador brasileño quiere salir y el Madrid venderlo, así que el único problema sería el precio y su alta cláusula. Mijatovic es consciente que el valor del jugador cae cada año y aceptaría una oferta que rondase los 15 ó 20 millones.
