(PD).- Ignacio Escolar se ha estrenado en el atril. El joven director de Público ha dado su primera conferencia en el importante Foro de la Nueva Comunicación. Sin despercidio. Aparte de proclamar a los cuatro vientos que él dirige un «periódico de izquierdas«, Escolar ha metido un bofetón a Prisa, recordándole las veces que la Justicia ha hecho publicar rectificaciones a El País. Tampoco se ha olvidado de lo que su competencia se embolsa con la prostitución.
El director de «Público», Ignacio Escolar, ha terciado este miércoles en la «guerra del fútbol» entre Prisa y los accionistas de su diario, Mediapro, contrastando las medidas que han tenido que tomar los tribunales a la hora de hacer rectificar a «El País» y «Público» por noticias derivadas de este conflicto.
Durante una conferencia en el Foro de la Nueva Comunicación, organizado por Nueva Economía Fórum, aseguró que mientras «El País» ha tenido que corregir sus textos por orden judicial contra Mediapro o La Sexta en «seis o siete ocasiones» en los últimos meses, eso no se ha dado ni una sola vez en su caso. «A mí, todavía ningún juez me ha obligado a publicar una rectificación», subrayó.
Escolar también aprovechó el coloquio posterior a su conferencia para lanzar una andanada expresa a «El País» por publicar anuncios de prostitución, como hacen también otros rotativos. Aportó datos según los cuales, el periódico de Prisa obtiene cinco millones de euros al año por este tipo de publicidad que «Público» tiene vetada.
Durante su conferencia, Escolar comentó que uno de los males de la prensa en España es que se ha producido un «tapón» en la dirección de los diarios, y en muchos casos perduran las mismas personas que ocupaban esos cargos con la Transición.
Son periodistas, a su juicio, «que ocupan un lugar en la vida pública que no corresponde a los periodistas», y que pertenecen a una generación de directores «que se ha acostumbrado a poner y quitar presidentes, alcaldes y líderes de la oposición».
«En ‘Público’ no creemos en el periodismo que conspira para quitar o poner presidentes, líderes de oposición o alcaldes».
