La puñalada trapera de Prisa a Calderón tras su dimisión no se hace esperar

La puñalada trapera de Prisa a Calderón tras su dimisión no se hace esperar


Fran Galván (PD).- De ocultarle los trapos sucios a iniciar la campaña de desprestigio más feroz y sangrante. En Prisa no hay medias tintas. Su silencio ante el pucherazo de la Asamblea ha sido roto apenas horas antes de la anunciada caída en desgracia de Ramón Calderón. La estrategia informativa -condicionada por los intereses económicos en común que mantienen el Madrid y Sogecable- ha saltado por los aires. Los medios de Prisa han visto el cadáver y se han abalanzado como buitres.

De nada sirvió que los informativos Cuatro obviaran el escándalo de los socios y compromisarios falsos. Tampoco el capote que le echó el diario As informando de un inverosímil acuerdo verbal entre Calderón y Cristiano. Cortinas de humo para desviar la atención de la polémica. Porque, decían, era una «persecución». Juanma Trueba, subdirector de AS, lo explicaba así: «existe una persecución salvaje contra Ramón Calderón de la que el AS no participa».

Pero dos días días después la dimisión es inminente y su portada ya no vende fichajes galácticos. «Calderón K.O. técnico». El giro es de 180 grados.

Toda la maquinaria de Prisa se ha puesto a rodar y parece que la consigna ahora ha cambiado y es clara: Calderón tenía que dimitir.

Alfredo Relaño, olfateando la que se veía venir, abría el paraguas culpando de la caída de Calderón, no a los escándalos, sino a un «volquete de ataques y acusaciones»:

Y además el club es un pandemónium, con acusaciones cruzadas, miradas torvas, rastreo informático, caza de brujas, acusaciones violentas a la cara, corrillos, invocaciones a la resistencia numantina, desmayos en los que se piensa en el abandono, codazos para ser el sucesor… Lo propio de un sistema hipercomplejo en un momento hipercrítico. Pero, sobre todo, la sensación de que el líder del grupo está liquidado, aplastado bajo la carga de un volquete de ataques y acusaciones, temeroso de que haya más cosas, más errores, más traiciones, más estruendo. Calderón ya es ceniza de sí mismo.

Paco González, director de Carrusel Deportivo de la Cadena Ser, ha analizado la dimisión de Ramón Calderón:

«Se ha producido 48 horas tarde. El escándalo era tan grande que no se podía alargar más. No podía decir que no sabía lo que estaba sucediendo en su club porque conocía a todos. De hecho dos de los implicados los había elegido él y los había puesto a trabajar en el Madrid. Lo veo lógico».

Sobre la situación en la que se queda el Madrid, González afirma que ésto le da tranquilidad al club y que habrá varios candidatos a la presidencia blanca:

«Ahora el Madrid tendrá un proceso electoral que le debe dar tranquilidad al Madrid y luego que se preparen las candidaturas. ¿Candidaturas posibles?: Todo el Florentinismo está empujando para que se vuelva a presentar. Heredando la candidatura de Villar Mir creo que va a haber dos, uno su hijo y Carlos Sainz que quiere ser cabeza de lista».

Enrique Ortego, subdirector del Diario AS, ha sido mucho más duro con Calderón:

«Ha dimitido dos años y medio tarde no sólo 48 horas tarde, las elecciones empezaron contaminadas y ha acabado contaminado»

Otro de los que también se ha referido a la noticia del día ha sido Manolo Lama, el periodista de la SER y de Cuatro espera que se presenten muchos candidatos por el bien del Madrid:

«Espero que todas las corrientes que surgieron contra Calderón que ahora afloren. Lo que pasa que para ser presidente del Madrid tienes que ser rico. Necesitas avalar 56 millones de euros».

«Florentino si se presenta tiene mucho ganado porque conoce todos los entresijos del club».

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