(PD).- Rafa Nadal prolongó su extraordinario comienzo de temporada con una victoria ante Gael Monfils (6-4, 6-4) que le abre las puertas de la final de Rotterdam, la segunda de 2009. Allí espera Andy Murray, verdugo de Mario Ancic (6-1 y 6-2), otro de los aspirantes a disputar la supremacía del manacorense en la ATP.
El duelo comenzó con tres roturas consecutivas, dos para el español y una para el parisino, que mantuvo el desequilibrio para cerrar el parcial. En el segundo, el balear quebró el saque rival en el quinto juego y conservó el suyo para cerrar el compromiso en 100 minutos.
Nadal se toma cumplida revancha de la derrota que encajó frente a Monfils el pasado 9 de enero, en los cuartos de final de Doha. Era la primera y, hasta ahora única, ante el parisino, al que previamente había superado en los Masters Series de París, Roma y Montecarlo.
El número uno del mundo, ganador del Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada, se enfrentará a Murray, uno de los tenistas que más parece haberle tomado la medida en los últimos tiempos.