(PD).- La polémica está servida. Nadie quiere hacerse cargo de los 500 millones que RTVE dejará de ingresar en concepto publicitario con la «drástica» reducción anunciada Zapatero la pasada semana.
Ayer, la vicepresidenta del Gobierno daba algunas pistas que situaban a las compañías de telecomunicaciones como las principales candidatas. Sin embargo, este sector ya ha empezado a movilizarse para echar balones fuera.
El presidente de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), Reinaldo Rodríguez, ha señalado que el pago de una tasa por parte de los agentes del sector de las telecomunicaciones para financiar la televisión pública no es «coherente» en la situación actual del mercado audiovisual español.
«La contribución para el saneamiento de la televisión pública debería proceder del sector audiovisual y no del de las telecomunicaciones», manifestó Rodríguez a los periodistas al término de su intervención en el foro ‘Innovación y tendencias de las telecomunicaciones’ organizado por Ericsson y ‘Actualidad Económica’.
El presidente del órgano regulador no considera que los operadores deban afrontar un esfuerzo para financiar la televisión pública, lo que supondría un modelo similar al del sistema de financiación francés en el que se incluye una tasa que debe ser abonada por parte de los operadores de telefonía e internet, y rechazó que esta sea la solución a los cambios que afronta el ente público, según informa Europa Press.
En cuanto a la posibilidad de que el Gobierno reserve parte de las frecuencias libres que dejen las televisiones a las comunicaciones móviles tras el apagón analógico, Rodríguez ha explicado que con la nueva tecnología digital se pueden multiplicar las capacidades por ocho e incluso por 10.
«Con estos cambios se dejan recursos para otras aplicaciones», ha apuntado Rodríguez, que ha añadido que en el mercado actual habría que plantearse además la viabilidad económica de tantos canales de televisión.
