Felipe Massa se encuentra en el Hospital AEK de Budapest tras ser intervenido para limpiar y curar una lesión ósea superorbital izquierda, producida tras impactar con su casco una pieza procedente de la pista.
El piloto brasileño, ha salido esta mañana del coma farmacológico que los médicos le habían inducido. Los médicos dicen que «está bien» tras sufrir la rotura del hueso supraorbital izquierdo y una conmoción cerebral.
le han retirado la medicación y Massa se ha despertado. Según las primeras informaciones, Massa ha movido las manos y ha respondido positivamente a las pruebas neurológicas. Durante la mañana, someterán al piloto a un Tac para analizar y definir sus condiciones cerebrales. Según el médico del equipo Toyota, Riccardo Ceccarelli, que ha hablado con el médico de Ferrari, Biffi, dice que Massa está bien.
El mismo médico ha comunicado esta noticia a Radio Rai.
CONDICIONES ESTABLES
Anoche sus condiciones eran estables, pero el equipo médico que le intervino apuntó la posibilidad de que Massa sufra daños cerebrales por culpa del corte que sufre en la frente.
Durante la tarde llegó a apuntarse que su vida corría peligro, extremo que fue desmentido por los responsables de Ferrari.
El accidente llegó apenas una semana después de que Henry Surtees falleciera en un accidente similar en una carrera de F-2 en Brands Hatch, golpeado en la cabeza por un neumático que perdió otro participante.
Ayer, Massa recibió en pleno casco, cuando iba a unos 280 km/h, el impacto de un muelle de suspensión suelto (una pieza que debe pesar entre 0,5 y 0,8 kg), procedente del Brawn del también brasileño Rubens Barrichello, que destrozó su casco a la altura de la ceja izquierda.
Massa, de 28 años, perdió el conocimiento unas décimas de segundo y el coche siguió recto para impactar con las vallas de neumáticos a 195 km/h –al parecer en los últimos metros intentó aminorar la velocidad pero no giró–, golpe que el monocasco soportó perfectamente, protegiendo al piloto.
Al ver el estado del piloto, los controles llamaron inmediatameente a la asistencia médica, que estabilizó al piloto antes de sacarlo del coche y lo trasladaron a la clínica del circuito –llegó y parecía poder mover los brazos– para evacuarlo minutos en helicóptero al Hospital, donde hoy le visitará su médico personal, que anoche salió de Brasil para atenderle
