Bueno, bonito y barato. Así es como ve el técnico portugués a Khedira, cuyo contrato con el Real Madrid termina a final de temporada.
Será el 30 de junio cuando varios de los mejores equipos europeos entren en la puja por el centrocampista alemán. Por ese motivo, el Chelsea pretende abordar su fichaje en enero. Es decir, cuando el Real Madrid se conforme con una mínima oferta por su jugador y cuando otros equipos no puedan asumir dicho desembolso. Habrá que ver si Abramovic es capaz de rebajar las pretensiones del conjunto blanco, que espera recibir 20 millones por Khedira.