El actual campeón del Tour de Francia aseguró no tener nada que ver con los cuatro casos de dopaje en su equipo, el Astana.
En declaraciones recogidas por el diario Sport, el italiano ha sido tajante: «Si alguien me asocia a estos casos, no entiende nada. Son cuatro imbéciles que conmigo no tienen nada que ver. Del último caso me enteré mirando en internet. Sólo espero que los que dirigen el ciclismo se lo hagan pagar».
«Si cogen otros diez estaré contento. Querría decir que los controles que se hacen y que hacemos funcionan. El problema no es mío. Yo pienso sólo en mi y tengo la conciencia tranquila», concluyó.
